El Servicio de Atención a la Familia (SAF) de la Policía Nacional en Palma, integrado por el servicio de atención a la mujer (SAM) y el grupo de menores (GRUME), registra en la actualidad un mayor número de denuncias por malos tratos entre parejas de entre 18 y 25 años, y en menor medida de jóvenes menores de 18 años que amenazan y agreden a sus compañeras sentimentales, respecto a parejas ya consolidas y con más años de relación.

Así lo expone uno de los inspectores de este grupo, adscrito en la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Policía Judicial, quien incide en que la mayor parte de entre las 10 y 15 denuncias que reciben de forma diaria corresponden a episodios de maltrato de hombres jóvenes a sus parejas y, principalmente, con más alcance psicológico que físico.

Es más, pese a que cada vez las mujeres están más concienciadas de la necesidad de denunciar, asevera que aún se dan casos de víctimas que no ponen estos hechos en conocimiento de la Policía, bien por el daño psicológico que padecen o por posibles represalias, aunque también debido a la "desconfianza" hacia la labor de las Instituciones. "Incluso a veces dicen que como quieren a sus parejas no se decidían a interponer denuncia", afirma el inspector.

Otros de los casos con los que se encuentra el SAF son las denuncias falsas o "exageradas" con las que algunas mujeres aseveran haber sido amenazadas "cuando a lo mejor la intención de ellos no era esa, y es entonces cuando tenemos que dirimir si se ha producido o no delito". El inspector explica que algunos agresores, al prestar declaración tras ser detenidos, se amparan en que "tienen derecho sobre ellas o en que son suyas"