La Policía Nacional está dispueta a examinar el interior del almacén de La Paca en Son Banya hasta que no quede una baldosa por mover. Ayer, en el subsuelo de unas dependencias anexas, apareció otra caja llena de billetes –la sexta– con lo que los investigadores creen que la cantidad total intervenida superará los seis millones. El dinero hallado la semana pasada en el mismo almacén ya ha sido contado y asciende a 4.300.000 euros.

Los policías volvieron ayer por la tarde a Son Banya, en una segunda parte de la Operación Musaraña, mucho más discreta que la primera. Un furgón con agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) se apostó en la entrada del camino que conduce al poblado, mientras los investigadores de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) volvieron a entrar en el almacén situado junto a la casa de La Paca.

Es el mismo almacén que fue examinado durante el viernes y el sábado y donde, bajo el suelo de hormigón, aparecieron seis cajas: cinco de ellas repletas de dinero y otra con una gran cantidad de joyas.

El domingo solicitaron la intervención de los bomberos para soldar la puerta de entrada y asegurarse de que nadie podía acceder al interior. Los bomberos tuvieron que intervenir de nuevo ayer para abrir la puerta de metal.

Durante toda la tarde los agentes estuvieron escarbando el suelo del almacén, incluidas varias dependencias anexas que estaban enlosadas. Las directrices eran no dejar un solo ladrillo por mover, para asegurarse de que no quedaba ninguna caja escondida.

Durante la tarde apareció un nuevo recipiente, también repleto de billetes, como los cinco de la semana pasada. Los responsables de la investigación pensaban proseguir con este trabajo durante los próximos días. La intención es no marcharse hasta estar completamente seguros de que no dejan nada atrás.

Mientras tanto, ayer acabó el recuento del dinero que contenían las cinco cajas halladas la semana pasada. La cifra es de 4.300.000 euros. En una sola de las cajas había 1.600.000 euros. Las estimaciones que hacía la Policía apuntaban a que, con el hallazgo de la caja de ayer y lo que pueda quedar todavía oculto en el subsuelo del almacén, se podrían superar los seis millones de euros.

La Operación Musaraña ha supuesto un tremendo golpe a las finanzas del clan de La Paca, la banda que hace apenas un año ostentaba la hegemonía del tráfico de drogas en el poblado.

El clan estaba ya muy debilitado por los últimos golpes asestados por la Guardia Civil y la Policía, que condujeron a la mayor parte de la familia a prisión.

Posteriormente recibieron duras condenas por el llamado Caso Son Banya, que enjuició los secuestros y torturas que los narcos cometieron con varias personas sospechosas de haberles robado otra gran cantidad de dinero –se habló de más de seis millones de euros– que escondían en un zulo en el poblado chabolista.