La Capilla del Santísimo de la Catedral estrenó ayer un bucle magnético para facilitar el acceso al culto a personas sordas, un sistema que está pensado para quienes utilizan implantes cocleares y audífonos.

De esta forma, a partir de ahora el templo cuenta con un bucle magnético gracias al cual las personas con discapacidad auditiva que llevan audífonos o implantes cocleares podrán seguir mejor los actos religiosos a los que asistan, ya que este sistema elimina ruidos de fondo y clarifica la escucha en determinados tipos de estancias.

Durante el acto de presentación, el presidente del Cabildo de la Catedral, Joan Bauzà, explicó que la instalación de este dispositivo supone "un gesto pequeño pero muy agradable de estimación hacia las personas que tienen un discapacidad auditiva".

Por su parte, el delegado territorial de ONCE en Balears, José Vilaseca, agradeció que se eliminen "barreras arquitectónicas, sociales y sensoriales" y se busque "la plena inclusión de las personas con discapacidad".

Los espacios que disponen de bucle como la Catedral cuentan con señalización para que los usuarios que desconocen que existe este dispositivo en su interior puedan conocerlo al acceder y pongan su implante o audífono en la posición adecuada para recibir el sonido directamente y sin ruido de fondo ni eco.

Demostración

Tras las intervenciones, un técnico y una persona sorda demostraron el funcionamiento de este dispositivo, que elimina el ruido de fondo y permite a los usuarios de audífonos o con implantes captar un sonido mucho más claro, lo que implica una mejora significativa de su calidad de audición.

La instalación de este bucle magnético en la Catedral ha sido posible gracias a un acuerdo de colaboración suscrito por la Fundación ONCE y la Conferencia Episcopal Española (CEE) en diciembre de 2015.