­Armin Karg, administrador único de Delta Sport S.L. tiene en vilo al Real Mallorca mientras decide si presenta alegaciones a la desestimación de la demanda que interpuso en su día contra el convenio de acreedores. "La semana que viene me reuniré con mis abogados y tomaremos una decisión. A día de hoy no puedo decir nada porque ni siquiera he leído el auto de la juez", dijo ayer a DIARIO de MALLORCA.

De la decisión que tome esta empresa textil, que durante cinco años fabricó la ropa deportiva del equipo con la marca ´Reial´, dependerá que el concurso de acreedores finalice en las próximas semanas o se prolongue hasta octubre o noviembre. "No estamos batallando por gusto. Simplemente creemos que el convenio tiene un fallo y nos acogemos a la Ley para defender lo que consideramos que es justo", valoró Karg refiriéndose a su oposición al calendario que se estableció para pagar la deuda.

La impugnación de Delta Sport al convenio ha estado rodeada de polémica porque esta empresa textil seleccionó a Pedro Mir, uno de los tres administradores concursales, como representante de los acreedores. La consecuencia directa de que el convenio no haya sido aprobado por la oposición de Delta Sport es que Mir y sus dos compañeros siguen percibiendo una importante remuneración a cargo del Mallorca. "Todas esas insinuaciones que se han hecho de que estamos alargando el proceso para que Mir siga cobrando son falsas. También es falso que Mir trabaje para nosotros, como se ha dicho. Ni trabaja, ni ha trabajado jamás para Delta Sport. De hecho, por lo que sé Mir está bastante enfadado con nosotros porque nos opusimos al convenio que él mismo contribuyó a redactar", aseguró Karg. "Todo esto lo hacemos como empresa, no para beneficiar a Mir", añadió.

La juez del concurso desestimó la impugnación de la empresa textil el 15 de marzo y desde entonces se abrió un plazo de veinte días hábiles para presentar alegaciones ante el mismo juzgado de lo Mercantil, aunque será la Audiencia Provincial la que finalmente decidiría en caso de que hubiese un recurso.

El alargamiento del concurso desde que el pasado 29 de diciembre Delta Sport impugnara está generando una sangría económica para el Mallorca que ha obligado a reducir el superávit del pasado ejercicio de once millones a 7,5. Y la cifra puede disminuir si el proceso se alarga todavía más. Cada uno de los tres administradores cobra 35.810 euros al mes mientras no se apruebe definitivamente la fase de convenio y cesen en sus funciones.