El alcalde de Pollença, Miquel Àngel March (Junts Avançam) valoró ayer la sentencia del Tribunal Supremo, que definió de "esperanzadora" en el sentido de que "deja la puerta abierta" al mantenimiento de la servidumbre de paso hacia la costa de Ternelles que está actualmente en vigor y que permite únicamente la entrada de veinte personas al día a la emblemática finca de la Serra.
March admitió que el fallo es "complejo" desde el punto de vista técnico y que presenta contradicciones que pueden contentar por igual a las dos partes en conflicto, pero hizo una lectura simple de la resolución judicial: "si el fallo anula la sentencia anterior que a su vez anulaba el derecho de paso por Ternelles, entendemos que la servidumbre vuelve a estar viva".
Respecto a la obligación que deberá cumplir el Ayuntamiento de adaptar el PGOU al PORN de la Serra de Tramuntana, el regidor señaló que "no implica que no se pueda acceder a la ribera del mar", por lo que la sentencia "abre la puerta" al mantenimiento del derecho de paso que había anulado el TSJB hace dos años.
Tanto el alcalde como los servicios jurídicos municipales consultados por este diario, entienden que la adaptación del Plan General al PORN deberá contemplar todas las normativas ambientales recientes, y en especial la modificación de la Ley para la Conservación de Espacios de Relevancia Ambiental que establece excepciones de uso en las zonas de exclusión definidas en los PORN, como es el caso de Cala Castell y el Castell del Rei.
