El GOB denunció ayer la situación de Cala Llamp: "Mientras el Ayuntamiento no ejecuta la demolición, los propietarios alquilan ilegalmente los apartamentos ilegales". En esta línea, el grupo ecologista detalló que, el pasado mes de septiembre, Mallorca Zeitung informó que los apartamentos en cuestión se ofertaban como alquiler vacacional a través del portal HomeAway por 1.400 euros a la semana. "Unos apartamentos que forman parte de la promoción inmobiliaria, financiada por sa Nostra, y que se levantó con una licencia concedida por Eugenio Hidalgo y anulada posteriormente por dos sentencias", remarcó.

En enero de 2014 tenían que iniciarse de forma voluntaria por parte de los propietarios las obras de derribo de los apartamentos ilegales e ilegalizables de Cala Llamp, pero los titulares no demolieron los edificios y el consistorio debía asumir el derribo de forma subsidiaria tal y como establece la normativa, a partir de agosto de ese mismo 2014.

Resulta que a día de hoy aún no se ha iniciado el derribo y, este verano, los polémicos apartamentos se ofrecían para alquiler. El GOB exige justicia y sentido común.