El Cant de la Sibil·la hipnotizó a Mallorca una vez más. El drama litúrgico y canto gregoriano apocalíptico que anticipa el final del mundo y el juicio de las almas, que en noviembre de 2011 fue declarado Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, fiel a la tradición fue interpretado en muchas iglesias de la isla ante numeroso público.
En Son Servera lo ha cantado Francisca Mas, una profesional de la música, directora de la coral Serverina y que ya lo ha interpretado en varias ocasiones. Los dos últimos años lo ha hecho acompañada de músicos de la Coral, que han cantado los interludios.
En Sant Lloreç, la joven Nuria Galmes ha sido la protagonista. Su canto ha servido para estrenar e inaugurar la nueva instalación eléctrica de la iglesia, que fue encendida por primera vez justo antes del canto.
La Sibil·la se ha convertido en uno de los elementos culturales más relevantes y singulares de Mallorca y en el elemento más característico de las Matines, que también suelen incluir otros rituales interpretados por niños, como el Anuncio del Ángel y el Sermó de la Calenda.
