La anterior legislatura, con Coloma Terrassa como cabeza de la corporación municipal, el ayuntamiento de Alcúdia pactó con el Govern balear un plan de financiación de la ampliación de la depuradora. Dicho plan establecía que el Consistorio asumiría inicialmente el gasto de las obras para que el Govern fuese devolviendo el importe a lo largo de diez años, comenzando con la primera cuota el año 2015. En total, el proyecto está presupuestado en aproximadamente ocho millones de euros.
Sin embargo, al intentar el nuevo equipo de gobierno acelerar el proceso y licitar las obras, "nos encontramos con que faltaba el informe de recursos hídricos, condición indispensable para comenzar las reformas" explica Joan Gaspar, concejal de relaciones institucionales. Ayer, por fin se expuso al público el informe.
Una vez transcurrido ese tiempo, el ayuntamiento aprobará el proyecto definitivo para que éste sea posteriormente aprobado por el Govern. Finalmente, el proyecto deberá permanecer entre cuarenta y cincuenta días en el Boletín oficial europeo, para proceder en última instancia a la licitación y contratación de las obras. Así, en el orden del día de la próxima sesión plenaria ya consta la aprobación del aplazamiento de los pagos por parte del Govern. En resumen, a pesar de los atrasos continuados por la ausencia de dicho informe, el equipo de gobierno estima que las obras podrán comenzar, definitivamente, durante el primer trimestre de 2016.
Prioridad
"La depuradora es una de nuestras prioridades, pues no solo se trata de una demanda ciudadana incipiente, sino que además es de primera necesidad para Alcúdia", asegura Antoni Mir, alcalde.
En ese sentido, los vecinos de la zona próxima a la depuradora acogen la noticia con esperanza, pues aseguran "ya era hora de que alguien solucionara la situación que vivimos, en Pere Mas i Reus y Avenida Tucán el olor llega a ser insoportable al caer la noche. Además, al pasar por delante debemos cerrar las ventanillas del coche y apagar el aire acondicionado para que el olor no lo impregne todo". Por el contrario, otros se muestran más recelosos, acogiéndose al tiempo que la ciudadanía lleva solicitando las reformas sin que ningún Consistorio consiga una solución real.
