Antoni Pastor, alcalde de Manacor durante los últimos once años, repasó ayer, casi a modo de despedida, la evolución de la economía local durante su mandato. En un claro ejercicio pre electoral, aprovechó que se espera un superávit de 800.000 euros al cierre del ejercicio 2014, para echar la vista atrás y constatar la mejoría. Empezando por los presupuestos: "cuando yo llegué en 2003 estaban en los 27,8 millones de euros, once años más tarde hablamos de 34,7, lo que significa un aumento de más de 25%. Unas cuentas estas últimas muy parecidas al del pasado ejercicio y que se prevé que sean ratificadas "intentaré que con un amplio consenso", en el pleno del próximo mes de diciembre.

Otro aspecto sintomático de evolución a pesar de la crisis, según Pastor, es el tiempo en que el consistorio paga a día de hoy a sus proveedores: "en menos de 30 días, cuando hace diez años se pagaba en tres meses". Unas facturas y recaudación "que se ha agilizado gracias al convenio con la Agència Tributaria (Atib)". Del millón de euros que la corporación municipal recaudaba en facturas en 2009, se ha pasado a los 4,1 millones de 2013, último dato oficial.

Índice de deuda y los 15 millones

Con el secado de la deuda municipal a la mitad llevado a cabo en la última década, de los 11,7 millones de euros de 2004 a los 5,9 previstos para 2015, también ha bajado el índice que marca la deuda, del 48 al 17,2%. "Cuando llegamos el remanente de tesorería era de 9 millones, una cifra que contenía mucho papel que había prescrito y que después de purgarlo se quedó en 2,7 millones en 2011. En 2013 el cojín municipal volvía a ser de 14 millones", explicó orgulloso Pastor. "A día de hoy el ayuntamiento de Manacor puede presumir de tener 15 millones de euros en el banco". Lo que permitirá alcanzar en 2015 una inversión récord en proyectos: cuatro millones.