Manacor contará en 2014 con dos nuevos parques públicos, uno situado en el antiguo solar de la fábrica de Perlas Majorica y otro en el barrio de Son Fangos, junto al nuevo instituto. Así lo hizo saber ayer la delegada local de Urbanismo y teniente de alcalde, Catalina Riera, que especificó dónde irán destinados los 1,7 millones de euros que el Ayuntamiento podrá invertir durante los próximos nueve meses, gracias al superávit presupuestario y a la cancelación del crédito estatal de cuatro millones para pagar a proveedores.

Actualmente la ciudad cuenta con dos espacios verdes, uno en el solar que ocupa el teatro municipal y la Policía Local y otro en el Molí den Beió, al lado de la Escola de Mallorquí.

En un corto espacio de tiempo empezarán las obras de acondicionamiento de la parte del antiguo solar de Majorica que por convenio fue cedida al consistorio en 2005. Casi 4.000 metros cuadrados que incluyen las dos naves originales de la empresa, el chalé donde residió el director de la fábrica, Pedro Riche, y una pequeña caseta de vigilancia. Este primer proyecto, que tendrá un coste de 200.000 euros, incluye el cierre de la parte pública del solar, la reforma de las fachadas de los edificios y la restitución de los elementos exteriores de la vivienda catalogada, "para dar una imagen más acorde con su historia", especifica Riera.

Ya en su interior, y una vez limpiado de residuos el espacio, se pasará a habilitar una zona de jardines con la plantación de árboles y arbustos, así como la colocación de bancos y un espacio específico de juegos infantiles. Tendrá un horario de apertura y cierre.

Circuito saludable

El segundo parque en proyecto estará situado justo al lado del IES Manacor, y ocupará 13.044 metros cuadrados de superficie de los terrenos denominados na Molla. Este gran espacio verde proviene, en parte, de la adjudicación de la segunda fase del instituto de Son Fangos, cuando el Ayuntamiento ofreció a la empresa Ferrovial la posibilidad de ocupar ese espacio como almacén de obra, a cambio de que la empresa realizara un proyecto de adecuación.

Ahora, basándose en ese proyecto modificado, el consistorio se gastará 95.000 euros para crear un paisaje "de bajo mantenimiento hídrico", señala el arquitecto municipal, Joan Pasqual. Lo primero que se hará es retirar los cables eléctricos de alta tensión que pasan por encima de la zona, para pasar después a crear un recorrido perimetral "para que la gente pueda ir a correr, a pasear o en bici". Circuito que se adecuará con la siembra de pebreboners, lladoners, amelias y acacias, además de matas y baladres, que delimitarán distintos espacios de prado. Como en el caso de los 4.000 m2 del solar de Majorica, el parque de na Molla también quedará cerrado por las noches.

Además de ello, se reservará un espacio en uno de los laterales de la finca para que el un futuro próximo, se habiliten una serie de huertos urbanos dada la proximidad de un pozo. También está previsto en el proyecto, ya redactado, demoler parte de la construcción existente en los terrenos y reformar la otra parte cuya estructura no presenta problemas, para que pueda ser utilizada, a medio plazo, como baños públicos o como cantina, "dependiendo del uso que le den los ciudadanos".