El presidente del Club Náutico de Porto Cristo, Daniel Matamalas, explicaba ayer los pormenores del nuevo espacio que acogerá barcos de gran eslora frente a la única playa de la localidad y calmaba a los vecinos críticos: "No se ha tocado ni se tocará la estructura del martell, por lo que no debe afectar a la arena ni al agua. Los barcos flotan, no supondrán un problema". Preguntado sobre posibles vertidos de aceite, gasoil u otros residuos, Matamalas es claro: "Está prohibido y nosotros desde el club somos los primeros que debemos actual. En general no debe haber ningún peligro para la playa".

Quien no opina lo mismo es el regidor de Agrupació Independent de Porto Cristo (AIPC), Bernat Amer: "No se ha informado en ningún momento al Ayuntamiento y me parece una falta de respeto. Hemos luchado mucho para que la playa esté en condiciones y hemos logrado mejorar sustancialmente la calidad del agua en los últimos años. Este proyecto la pone de nuevo en peligro, como también puede disminuir la cantidad de arena ya motivada por la estructura del martell.

Para Matamalas esta "era una oportunidad buscada desde hace unos cuatro años que ayudará a equilibrar nuestro presupuesto. Somos una entidad sin ánimo de lucro que reinvertimos en la promoción náutica".