El PP de Alcúdia ha pasado, en menos de un mes, de cuestionar la viabilidad de la importación de residuos para incinerar en Son Reus, principalmente por la intención del Consell de que sean desembarcados en el puerto del municipio, a asumir las tesis defendidas por su partido en la institución insular.

En el pleno extraodinario celebrado ayer en el Ayuntamiento, los populares desestimaron la moción presentada por PSOE y Convergència en la que se instaba a la corporación a rechazar la importación de residuos de Europa. El voto contrario del PP impidió que la propuesta prosperase, aunque la alcaldesa Coloma Terrasa tuvo que hacer uso del voto de calidad para romper un empate entre PP y oposición motivado por la abstención de la edil no adscrita Carme Garcia.

La no aprobación de la moción invita a pensar que el Consell de Mallorca no encontrará oposición alguna en el ayuntamiento ´alcudienc´ para que los residuos, ´combustible sólido´ en la jerga del PP, sean desembarcados en el puerto comercial de Alcúdia para su posterior traslado a Son Reus.

"Engañan a los ciudadanos"

Los dos partidos de la oposición argumentaron su postura contraria al proyecto del Consell y acusaron al PP de "engañar a los ciudadanos" con el uso de eufemismos. "Hablan de combustible para referirse a residuos", apuntó el socialista Pere Malondra, que cuestionó que "la única excusa del PP sea que el recibo de basuras no suba 15 o 20 euros, cuando este partido no ha tenido problema alguno en aumentar el IBI y otros impuestos". A su entender, el Consell "hace de comercial" de Tirme, la empresa concesionaria del tratamiento de residuos que "será la gran beneficiaria" del proyecto.

Por su parte, el portavoz de Convergència, Miquel Llompart, explicó que las "dudas" que tenía sobre esta cuestión "no han sido resueltas". Emplazó al PP a "hablar claro" y tachó de "cobarde" que los populares acepten la importación de residuos siempre que no desembarquen en el municipio.

El portavoz del PP, Joan González, incidió en la idea de que "no son residuos, sino combustible sólido derivado de residuos" y alertó de que, "de una manera o de otra", Tirme tratará de amortizar el coste de la incineración. "Hay dos formas de hacerlo: al estilo PSOE, subiendo las tasas, o al estilo PP, buscando alternativas como ésta", argumentó.

González recriminó al PSOE la "falta de ´seny´" que, a su entender, supone "repartir panfletos entre los turistas para denunciar que Alcúdia será el basurero de Mallorca", en referencia a una campaña informativa organizada por los socialistas hace unas semanas en el puerto. "Si tienes un problema en la empresa, se discute dentro de la empresa, no con sus clientes", apuntó el portavoz popular. Este acto informativo del PSOE también fue criticado por Convergència. Por su parte, Malondra negó tajantemente que se entregaran folletos a los turistas, anque admitió su distribución entre los ciudadanos de Alcúdia.

La regidora Carme Garcia, cuyo voto era determinante para aprobar o no la moción, optó por la abstención alegando su "desconocimiento" sobre esta cuestión. "Sólo soy una regidora de Alcúdia, no tengo ningún poder de decisión sobre este tema y no sé si está bien o está mal", dijo.

Malondra definió esta actitud como un "acto de cobardía", mientras que Llompart criticó la abstención de Garcia porque, según dijo, "la política implica posicionarse". El debate sobre la moción acaparó gran parte del pleno.