El bastión de Santa Maria, una torre de las antiguas murallas de Alcúdia que cedió en parte en marzo de 2011 como consecuencia de un exceso de humedad, recuperará su estructura original en el plazo máximo de cuatro meses. Los operarios de la empresa adjudicataria de la reforma, Refoart S. L., en coordinación con dos arqueólogos y dos restauradores del Consell, además de los técnicos municipales, han iniciado los trabajos de colocación del andamiaje necesario para acometer una restauración "complicada" que se ejecutará en base a imágenes antiguas del bastión y que aprovechará el mismo relleno y las mismas piedras que se desprendieron hace dos años y medio.

El coste de la reforma asciende a 131.400 euros, aportados totalmente por el ayuntamiento de Alcúdia a la espera de que se depuren responsabilidades sobre el desprendimiento, un proceso que está siendo "evaluado" por los juristas municipales, según apuntó la alcaldesa Coloma Terrasa durante la visita que realizó ayer a las obras del bastión.