Una carta crítica con la última decisión de la Conselleria de Educación de insistir a los padres de nuevo en la elección de la lengua vehicular está corriendo como la pólvora en las redes sociales. La misiva, firmada por Xesca Salas Bas, madre de un alumno escolarizado en el CEIP Sa Marina de Llucmajor, utiliza la ironía para criticar el envío masivo de cartas a todos los nuevos escolarizados. "Nuestra conciencia nos obliga a avisarlo e informarlo de que algunos directores generales de su Conselleria, y por lo tanto muy cercanos a usted, han tenido un comportamiento sedicioso e insubordinado hacia su autoridad", escribe Salas dirigiéndose al conseller Rafel Bosch. La carta que han recibido las familias está firmada por los directores generales Mercedes Celeste y Onofre Ferrer.

La madre protesta por "el gasto tan elevado en época de recortes" que supone "el papel, las fotocopias a doble cara para enviar la carta bilingüe, los sobres, las pegatinas personalizadas, el franqueo y las horas de funcionarios para redactar y ensobrar", en una medida que califica de "intolerable persecución lingüística". Por último, la madre agradece el trabajo de los maestros y pide a Bosch que "castigue con el cese a los dos directores generales" que firman la carta.