Es Turó de Sant Joan está de nuevo en peligro cuando la zona parecía más protegida que nunca. El pasado 17 de noviembre, el ayuntamiento santjoaner declaraba el enclave Bien de Interés Paisajístico y Ambiental y lo incluía en el catálogo de Patrimonio local por unanimidad. Con él, las zonas rurales del Oratori de Consolació y el Puig de Sant Onofre. Al mismo tiempo y ocho días antes, la Justicia dictaba sentencia en contra del proyecto de construcción de 36 viviendas propuesto en febrero de 2007.
Pero el mismo día 17, la misma constructora Coliseum 44, registraba en el consistorio un nuevo proyecto muy similar al anterior, salvo por la reducción a 20 de las viviendas propuestas y el aumento de la superficie de los pisos.
Hace cinco años, el alcalde conservador, Joan Matas Ditaler, denegó la licencia de construcción de más de una treintena de pisos en es Turó. Coliseum 44 interpuso un recurso defendiendo la legalidad del proyecto, y exigiendo al Ayuntamiento 1,3 millones como indemnización. La reclamación fue archivada por la vulneración del Pla Territorial de Mallorca (ya que varias viviendas no alcanzaban los 80 metros cuadrados mínimos), de las Normas Subsidiarias de Sant Joan, y en tercer lugar por el no cumplimiento de la Norma de Aplicación Directa, que establece la prohibición de construir "edificios, muros o cierres, que limiten el campo visual para contemplar la belleza natural, rompan la armonía o desfiguren la perspectiva propia del lugar".
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