El pleno del Ayuntamiento de Llucmajor rechazó ayer una moción del PSM-Entesa que instaba a prohibir la presencia de animales salvajes en los circos que se instalaran en el municipio. El texto fue rechazado con los trece votos en contra de PP y ASI, mientras que PSOE, PSM y CxI emitieron ocho votos a favor.

Tras la votación, un grupo de once activistas en favor de los animales gritó a los concejales en señal de protesta. Uno de ellos se dirigió al regidor de Medio Ambiente, Joan Toni Amengual, voceando: "Esos animales viven encerrados toda su vida. ¿A ti te gustaría vivir encerrado?".

La moción fue presentada por el grupo del PSM-Entesa. La defendió el regidor nacionalista Jaume Tomàs, que destacó los animales de circo no satisfacen las necesidades de las especies y tampoco contribuyen a su conservación.

Amengual ejerció la réplica por parte del PP. Alegó que el consistorio respeta a los animales y que la legislación vigente está consolidada. "La ley es del año 1992 y es muy clara. Si no se ha modificado desde entonces, será por algo. No se estará haciendo tan mal", declaró el responsable de Medio Ambiente, que provocó carcajadas entre los animalistas.

En la misma línea se expresó Guillem Roig (ASI), que manifestó que iba a votar en contra de la moción porque "se supone que todos los circos están supervisados".

Bernardí Vives (CxI) dijo que era "ridículo" debatir si "un animal enseñado a base de garrotazos estaba bien cuidado". "Los únicos que están bien son el Oso Yogui y Bambi, que están libres y corren", declaró el regionalista.

Joan Jaume Sastre (PSOE) afirmó que aprobar la moción era una cuestión de voluntad política y de "ir un paso más allá de la ley".

Durante la exposición de la norma, los activistas de Anima Naturalis permanecieron de pie mostrando pancartas con lemas como "¡Libertad para los animales!" o "Circos = Esclavitud". Tras la votación, en la que se rechazó la propuesta, reprendieron a gritos a los regidores del PP y ASI, y se marcharon de la sala de plenos coreando "Basta ya de maltrato animal".

Además, el pleno debatió la liquidación de los presupuestos de 2010. El alcalde Joan Jaume Mulet (PP) afirmó que "están encaminados al saneamiento económico", mientras que la oposición les recriminó que en años anteriores se hayan previsto más ingresos de los que realmente se podían obtener. El pleno también aprobó la solicitud de un préstamo de 1,29 millones de euros al ICO para pagar a proveedores y la adhesión del consistorio a la central de compras del Gobierno, de forma que puedan ahorrar en las peticiones de material. Aunque PSOE, PSM y CxI reconocieron la necesidad de recortar gastos, manifestaron la objeción de que el Ayuntamiento dejará de proveerse en los comercios del pueblo. El alcalde afirmó que no cree que se vayan a ver perjudicados.