–¿Misión imposible para el PP gobernar en el feudo socialista de Algaida?

–Es difícil pero no imposible porque ahora mismo hay una dinámica política que está cambiando totalmente. La gente está bastante quemada con la situación económica y se puede dar un cambio. Aquí en Algaida esta vez se dividen el voto entre el PSOE y el PSM, el PSM no se presentaba en los anteriores comicios, y luego hay unos votos de los recién llegados porque hemos aumentado la población, que no sabemos la tendencia, el sentido del voto, cuál será. Estamos a la expectativa por todo ello.

–¿Qué falla en este municipio?

–No quiero criticar, pretendo hacer una campaña electoral en positivo, diciendo todo lo que podemos hacer nosotros. Tenemos una lista joven, renovada, con nuevas ideas, moderna, con ganas de trabajar. Tenemos un programa ambicioso, con austeridad pues sabemos que los recursos estos años serán menores que hasta ahora debido a la situación económica.

–Hace cuatro años el PP prometió un nuevo instituto en el pueblo.

–Esta vez no lo hemos puesto en el programa porque ahora se ha hecho una gran inversión en la escuela, y ahora mismo es complicado hacer un instituto en Algaida. Tenemos que ser realistas con lo que podemos hacer ahora mismo, y ofrecemos otro tipo de proyectos. Por ejemplo, apostamos por el turismo, dinamizar las empresas, nos interesaría hacer unas rutas en el municipio, cabe recordar que están Algaida, Pina y Randa. Unas rutas turísticas por diferentes sectores, merendando en unos sitios determinados, realizando diferentes visitas para dar a conocer nuestra historia y patrimonio. También proponemos el polígono de servicios y, por otra parte, crear para los nuevos emprendedores el coworking, unas salas para los empresarios. El Ayuntamiento pagaría el internet y la corriente, ellos un precio simbólico por la mesa. Se trataría de oficinas compartidas, en el Casal Pere Capellà.

–¿Variante en Algaida y reforma de la carretera hasta Llucmajor?

–Así es. También defendemos estas dos iniciativas, importantes para mejorar la circulación y la seguridad.

–¿A qué han obedecido las renuncias y divisiones en el PP?

–No es que hubiera una división. Unas dimisiones fueron por motivos de trabajo y otras, personales. Los nuevos que hemos entrado nos hemos implicado mucho, hemos regenerado el partido, Maria Rosa está muy contenta porque hemos cumplido. Hemos pasado de lo que era muy negro a lo que es muy blanco ahora mismo. Todo superado y ningún problema.

–¿Se atreve con una quiniela?

–Prefiero no pronunciarme. Pueden pasar muchas cosas. Me gustaría que perdiese la mayoría absoluta el PSOE, al menos tener que gobernar de otra forma porque hasta ahora han hecho lo que han querido y nadie les ha puesto ninguna condición. Las mayorías absolutas tantos años seguidos tampoco son buenas para nadie, sean de un sitio u otro.