El ayuntamiento de Manacor está pendiente de una nueva reunión con la conselleria de Educación para acabar de determinar qué funciones tendrá el actual IES Na Camel·la, una vez que ya se ha anunciado que sus alumnos serán trasladados al nuevo instituto de Son Fangos a mediados del mes de septiembre.

Entre otras cosas, uno de los puntos clave se centrará en la necesidad urgente de que tanto la conselleria de Sanidad como la de Educación (responsable de la gestión del edificio), se pongan al fin de acuerdo para la construcción del segundo centro sanitario de la ciudad en el patio de Na Camel·la, "imprescindible dado el crecimiento de la población", apunta el regidor de Urbanismo, Bernat Amer (AIPC). Esta sería una de las pocas soluciones viables, dado que el Ayuntamiento no dispone por el momento de terrenos grafiados para uso sanitario.

Según el actual convenio acordado entre el Consistorio y Educación, el viejo instituto debe ser reconvertido en sede conjunta de la escuela oficial de idiomas, la Escola de Mallorquí (que se vería obligada a abandonar así su recién estrenado Molí den Beió) y el CEPA Llevant de educación para adultos. Todo ello dejaría libre el patio interior del recinto "que cumpliría perfectamente con las exigencias del Govern", añade Amer, "ya que además ninguno de estos colectivos necesita un patio para sus alumnos".

Y es que una de las directrices fundamentales marcadas por la conselleria de Salud a la hora de construir un PAC, es que el solar debe tener, por lo menos, 5.000 metros cuadrados de superficie, lo que cumple con holgura el espacio exterior de ´s´Industrial´.

De esta forma, además, el ayuntamiento quiere salir al paso de las últimas críticas del PSOE que acusó a AIPC y PP de estar dejando pasar una partida de cuatro millones de euros que, según los socialistas, la propia conselleria de Salud y Consumo tiene reservada para la construcción del segundo centro de salud de la ciudad y tercero del municipio.

El IES Na Camel·la está situado en el inicio del paseo del Ferrocarril, junto a la plaza Madrid, lo que le confiere una conexión prácticamente directa con el hospital comarcal, a medio kilómetro de distancia.

Pese a ello, el consejo escolar municipal, formado por directores de los centros docentes municipales, no se muestra muy contento con una posibilidad que restaría espacio educativo.