En el club de tenis de Costa d´en Blanes, en el municipio de Calvià, hay un pequeño gimnasio con unas espléndidas vistas al mar y a Puerto Portals que está especializado en ofrecer entrenamientos personales. Desde hace unos cuatro años, los dos jóvenes licenciados en INEF Pepe Jaume y Xavier Fuster dan vida al Sporting Fitness Club y se encargan de poner en forma a todo tipo de clientes, no sólo de la zona, sino también procedentes de Palma y del Llevant mallorquín.

-¿Tener entrenador personal es cosa de ricos?

-Es un tópico. Tal vez en el pasado podía ser así, aunque actualmente los entrenamientos personales son asequibles para la mayoría de la población. Cada vez más, quienes acuden al gimnasio se dan cuenta de que pagar un entrenador no es un gran gasto económico, sino una inversión en su propia salud.

-¿La clase de clientes se ajusta a un perfil determinado?

-No. Tenemos de todo tipo, desde personas con rentas muy elevadas hasta ´mileuristas´, porque ven que hacer ejercicio con un entrenador personal es más rentable.

-¿Por qué?

-Es mucho más rentable en todos los sentidos, sobre todo porque el entrenamiento se adapta a cada cliente y así se consiguen mejores resultados y más rápido. Además, muchos de los que acuden a un gimnasio por su cuenta y pagan una cuota mensual acaban por no ir. En cambio, con el entrenador no suelen fallar.

-¿Qué buscan con el ejercicio?

-Hay diferentes objetivos. Unos quieren mantenerse en forma, otros vienen para evitar lesiones y, la mayoría, sobre todo las mujeres, quieren perder peso.

-Para estos objetivos también se necesitan otras cosas.

-Aquí ofrecemos un tratamiento integrado con un fisioterapeuta y un dietista para trabajar de modo individual las necesidades de cada cliente. Además, tenemos clases particulares del método pilates con máquinas.

-¿Aprovecháis la playa que hay junto al gimnasio?

-Por supuesto, hacemos muchos ejercicios al aire libre, junto al mar. A veces también aprovechamos las pistas de pádel existentes en el Sporting Tenis Club.