'No alimentes al monstruo' es el título de la campaña que varios municipios, entre ellos Palma, pondrán en marcha para concienciar a la población de que no tire las toallitas húmedas al váter, ya que este material causa graves problemas en la red pública de saneamiento. Además, Cort adaptará la ordenanza de Calvià sobre tratamiento de residuos, con sanciones para los infractores.

"Muchos productos llevan la etiqueta de que se pueden tirar al váter, cuando realmente provocan atascos", afirmó ayer sobre las toallitas húmedas Andreu Serra, presidente de la empresa Calvià 2000. El municipio calvianer tiene previsto aprobar mañana una nueva ordenanza para prohibir y sancionar a quien tire residuos no aptos a la red pública.

La normativa de Calvià establece sanciones que irán desde 700 euros, para infracciones leves, a 3.000 euros, para las infracciones consideradas como muy graves e incluirá una guía de buenas prácticas para evitar que se forme el conocido como 'monstruo de las toallitas'.

El ayuntamiento de Calvià ha puesto a disposición de los otros municipios que forman parte de la Xarxa Aigües Públiques de Mallorca, entre ellos Palma, la nueva ordenanza y la presidenta de Emaya, Neus Truyol, ha confirmado que se estudiará y se adaptará.

El texto del ayuntamiento de Calvià regula el tratamiento de residuos que hoy son problemáticos, como el agua de piscinas, la descarga de camiones cisterna, los depósitos de las autocaravanas y los baños químicos portátiles. A ellos hay que sumar los que están creando los atascos en canalizaciones, estaciones impulsoras y depuradoras: las toallitas, discos de algodón, bastoncillos y compresas.

En el municipio calvianer, la acumulación de toallitas y otros residuos no aptos para ser tirados por el váter generó el pasado año un volumen de desperdicios de 851 toneladas, que obligaron a realizar más de 2.500 intervenciones en la red pública con un coste de 416.000 euros.

Gran parte del problema radica en las etiquetas de estas toallitas y papel húmedo, ya que los fabricantes aseguran que son biodegradables, expusieron ayer Truyol y Serra. "Nos falta normativa estandarizada europea que impida este tipo de etiquetaje", afirmó Andreu Serra.

La Xarxa Aigües Públiques de Mallorca promoverá la adhesión de los ayuntamientos a la declaración sobre la posición del sector internacional del agua sobre los productos no aptos para ser tirados por el inodoro, como medida de presión para que se regule el etiquetado de toallitas y otros productos de higiene.