Más de la mitad de la flota de autobuses de la EMT supera los 15 años de antigüedad y, tal como han anunciado varias veces los responsables políticos de Cort, se renovará a lo largo de la legislatura del Pacto. La Empresa Municipal de Transportes cuenta con 178 vehículos en total, aunque ayer el presidente del comité rebajó esta cifra a unos diez menos debido a los que se van averiando de forma habitual. Los 95 más obsoletos son los que la EMT sustituirá, pero aún no ha concluido la redacción del pliego de condiciones para su adquisición.

Por ello se concentraron ayer los conductores, que ven cómo otras empresas públicas son más ágiles a la hora de renovar su flota, en referencia a Emaya, mientras sus jefes "llevan 18 meses dando ideas, estudiando y negociando". "Hablan de la herencia recibida, pero en las demás empresas están llegando vehículos nuevos y aquí estamos apurados, con servicios mínimos, y hasta el verano que viene no los tendrán, pese a que los problemas se veían venir", tal como criticó el portavoz.

Cambios para mejorar

En un comunicado de prensa, la EMT informó ayer de que "trabaja para ofrecer el mejor servicio a la ciudadanía y que los empleados hagan su labor en las mejores condiciones". Por este motivo, añade el texto de Cort, "ante una temporada turística que supone un incremento del tránsito en la ciudad en momentos puntuales, desde la dirección se trabaja para incorporar medidas que ayuden a paliar la situación".

Una de las actuaciones desde que comenzó la legislatura ha sido "modificar horarios para dar más tiempo de recorrido a los conductores en ocho líneas tras las conversaciones mantenidas con los sindicatos", explicaron. Ejemplificaron que se ha hecho este cambio en la línea 1 -la del aeropuerto- o enviando refuerzos cuando se detectan autobuses completos o retrasos puntuales. Ante cualquier otra incidencia que se va detectando, la dirección "mantiene una línea de diálogo permanente con los sindicatos para tratar estas cuestiones, unas reuniones de las que se extraen conclusiones".

Por ejemplo, la semana pasada se acordó estudiar "cómo mejorar y ampliar el tiempo de recorrido de la línea 3 -de Illetes al Pont d'Inca-, ya que al disponer de un trayecto muy largo, cualquier tipo de incidente provoca retrasos que tienen que ser corregidos", según detalla la nota de prensa.