La Fira Agrícola, Ganadera y Comercial de Son Ferriol alcanzó ayer los 25 años con una salud de hierro, a tenor de la gran afluencia de visitantes desde la mañana. La avenida del Cid se convirtió en un gran escaparate por donde miles de personas se pasearon ayer.

Los comercios de la zona sacaron sus productos a la calle, los artesanos montaron sus expositores y los bares y restaurantes acabaron de completar el ambiente festivo al montar mesas y barras de bar en las calles perpendiculares a la avenida del Cid.

La oferta gastronómica, como en casi todas las ferias, tiene cada vez más importancia en Son Ferriol. La Escola d´Hoteleria de les Illes Balears montó un expositor de comida y bebida, al igual que los centros escolares de la barriada, que recaudaban fondos. Panades, cocarrois y coques tradicionales no podían faltar en esta cita.

Fiel a su origen, esta fira conserva la demostración de perros de pastoreo y ofreció un concurso de juegos y doma española, en el que participaron niños.

Sin embargo, la exposición de animales fue menor que la de otros años. Tractores, coches antiguos, aves de cetrería, artesanía, textil, productos alimentarios, e incluso piscinas formaron parte de la gran exposición.

La XXV Fira de Son Ferriol se inauguró oficialmente a las once de la mañana con los gegants, dimonis y xeremiers, aunque a esa hora ya resultaba difícil aparcar. Un comentario recurrente entre quienes paseaban era "quina gentada!".

Parte de la corporación municipal se desplazó ayer a Son Ferriol. El alcalde, José Hila, el teniente de alcalde de Modelo de ciudad, Antoni Noguera, y los regidores de Participación Ciudadana, Eva Frade; de Turismo, Comercio y Trabajo, Joana Mª Adrover; de Cultura, Llorenç Carrió, y de Sanidad y Consumo, Antònia Martín, recorrieron la feria. También estuvo Marga Duran, del PP, y Josep Lluís Bauzà, de Ciudadanos.

Algunos de los artesanos que participaron en esta cita coincidieron al afirmar que una gran afluencia de visitantes no garantiza buenas ventas.

Un vendedor de maquinaria agrícola lamentaba la pérdida de protagonismo de su sector. La competencia del negocio on-line y las grandes cadenas de bricolaje han perjudicado a los negocios especializados, añadió el comerciante. Según este testimonio, tan solo las ferias de Sineu, Inca y Llucmajor resultan todavía provechosas para su negocio.

Al mediodía, la cola de vehículos que querían acceder a Son Ferriol provocó retenciones en las carreteras de Manacor y de Sineu.