La bajada de la tasa de incineración en un 4,5 por ciento anunciada por el Consell de Mallorca para el próximo año no tendrá repercusión en los recibos que se pondrán al cobro y que tendrán que abonar los ciudadanos de Palma por este concepto.

El Ayuntamiento, que actúa de recaudador del servicio gestionado por el Consell, alega para justificar la no modificación de las tarifas de tratamiento, transferencia y transporte, además de la incineración, de los residuos sólidos urbanos que el próximo año se prevé que se incremente en un 2% las toneladas de basura recogidas en el término municipal de Palma.

Por ello, el Ayuntamiento tendrá que abonar al Consell una cantidad similar a la del presente año, por lo que no se contempla una modificación a la baja de los importes incluidos en la actual ordenanza fiscal.

De hecho, en el proyecto presupuestario para 2017 se mantienen las mismas tasas actuales, que implican, por ejemplo, que las viviendas, apartamentos y despachos profesionales pagarán por este concepto 126,27 euros anuales. Las oficinas, establecimientos y locales comerciales con una superficie útil de menos de 100 metros cuadrados abonarán 203,43 euros anuales.

La tasa para los bares y cafeterías de menos de 100 metros cuadrados es de 452,67 euros, mientras que lo hoteles con comedor pagarán 47,35 euros por plaza y los que no tengan comedor 29,07 euros. El año pasado el Ayuntamiento de Palma puso al cobro recibos por un importe de 31,1 millones. Más de dos tercios de esta cantidad es asumida por los propietarios de las viviendas, apartamentos y despachos profesionales. Con la rebaja prevista por el Consell los ayuntamientos deberán abonar a la institución insular por tonelada recogida en su municipio 126,84 euros en lugar de los 131,34 euros actuales.