El presidente de Emaya, Andreu Garau, ha defendido hoy en su declaración como imputado ante el juez de Instrucción 6 de Palma, Miguel Florit, la ejecución de un aval de la empresa Envac por 240.240 euros, y ha criticado la querella presentada por dicha compañía que considera "una burda maniobra".

Garau ha declarado durante más de una hora y media ante el juez Florit, imputado por presunta apropiación indebida, después de que Envac se haya querellado contra todo el consejo de administración de Emaya por la ejecución el pasado julio de un aval bancario que la empresa considera que se le tenía que haber devuelto hace 8 años.

El aval lo constituyó la empresa cuando le fue adjudicada la instalación del sistema de recogida neumática de residuos de Palma en 1998 y, según Garau, ha sido ejecutado correctamente por decisión del consejo de dirección de Emaya, después de que el Ayuntamiento haya demandado a la compañía y le reclame 26,5 millones de euros por daños y perjuicios porque el servicio se colapsó en mayo de 2012.

En declaraciones a los medios tras comparecer como imputado, Garau ha explicado que considera que la querella que ha presentado Envac contra el consejo de administración de Emaya es "una burda maniobra de presión" que guarda relación con la demanda por daños y perjuicios y ha asegurado que el Ayuntamiento de Palma defenderá los intereses de los ciudadanos en este asunto y no cederá a la misma.