Las cerezas más famosas del mundo de la noche quieren volver a Palma y quieren hacerlo por la puerta grande. La empresa Pachá está ultimando un acuerdo para regresar a su antiguo emplazamiento del paseo Marítimo a partir de este verano.
La conocida discoteca eivissenca está en conversaciones con Cursach Ocio, que es propietaria de Abraxas. Si las dos compañías cierran el trato, Abraxas cerrará sus puertas hacia el mes de mayo y se refundará como la nueva franquicia de Pachá en Mallorca.
La empresa con sede en Eivissa inició los contactos para volver a Mallorca el pasado otoño, después de que cerrara su filial en Son Caliu por desacuerdos con los gestores de la franquicia calvianera. Su paso por el municipio vecino duró dos años: de junio de 2010 a agosto de 2012.
Aunque en los meses de verano era rentable, durante el invierno notaban la falta de clientela cercana, que prefería no desplazarse hasta Son Caliu. Por eso el emplazamiento accesible y el valor sentimental del antiguo local han sido dos claves para regresar al paseo Marítimo de Palma. Y lo hará de la mano del grupo empresarial Cursach Ocio, propiedad de Bartomeu Cursach, que también posee otros locales de ocio nocturno de Ciutat, como Tito´s, Io Music Club, Riu Palace o Mega Park.
Según el director general de la compañía mallorquina, Tolo Sbert, el acuerdo para que Pachá vuelva a Palma está cerrado "en un porcentaje muy alto". "Solo falta apuntalar cuestiones de tipo económico y otros detalles contractuales, por lo que en ocho o diez días ya sabremos si se firma el acuerdo", señaló el directivo. Por su parte, Pachá no quiso hacer declaraciones a este medio.
Nueva decoración
Para la apertura entre mediados y finales de mayo, el grupo Cursach no ha previsto hacer grandes obras de remodelación en el todavía Abraxas. "No habrá una inversión alta para no entrar en riesgos empresariales innecesarios, pero sí que modificaremos la decoración para adaptarlo a los detalles de Pachá y sus cerezas", agregó Sbert.
Durante estos días, varios operarios están trabajando para renovar algunas instalaciones de Abraxas y los sacos de obra son visibles a pie de calle. La compañía ha aprovechado estas fechas para la remodelación, ya que la discoteca está sin funcionamiento durante este invierno.
También han cerrado en temporada baja otros establecimientos emblemáticos del paseo Marítimo, como Tito´s y los hoteles Melià Victoria y Palas Atenea, aunque éste último reabrió sus puertas el 1 de febrero. A estos locales, hay que sumar los cierres definitivos de las discotecas Mar Salada, situada en el Club de Mar, y El que Faltaba, junto a Tito´s.
Con la pérdida de esos grandes negocios y el desplazamiento de parte del ocio nocturno juvenil al polígono de Son Castelló, Santa Catalina y el centro de la ciudad, el panorama invernal del Marítimo es harto más desértico que el de otros años. En esas circunstancias y con el ánimo de volver a ser un referente de la noche, quiere iniciar Pachá su segunda etapa en la ciudad. La marca de las cerezas abrió sus puertas en el Marítimo en abril de 1996. En 1999 el grupo Cursach se alió con la empresa y asumió la gestión de la franquicia hasta que cerrara en marzo de 2006 por desacuerdos sobre el canon que debían pagar a los eivissencs por explotar la marca. Entonces el local recuperó el nombre de la discoteca Abraxas, que había existido años antes en es Jonquet. "Abraxas ha funcionado bien y su cierre no se debe a que haya dejado de funcionar, pero Pachá es una marca que tiene mucha fuerza y es bueno que quiera estar en Mallorca. Además, no hace falta hacer una gran promoción, porque todo el mundo ya conoce su identidad", razonó el directivo Sbert.
