El presidente de Emaya, Andreu Garau, ha anunciado que ha remitido una notificación a la unión de empresas (UTE) concesionaria de la recogida neumática de basuras del centro histórico responsabilizándola de las averías y de los "cuantiosos daños" que se están produciendo en este sistema.

Así lo ha dicho durante el debate en el pleno del Ayuntamiento de Palma de una proposición del PSM-IV-ExM, que ha sido rechazada con los votos del PP y la abstención del PSOE, sobre este sistema de recogida que actualmente está fuera de servicio desde la última avería ocurrida el 16 de mayo.

Garau ha reconocido que este sistema "se puede considerar muy caro" y que si hoy se tuviera que abordar el equipo municipal se plantearía otras soluciones, pero ha añadido que ahora tiene que convivir con esta instalación y la "responsabilidad" de hacerla funcionar.

El presidente de Emaya ha apuntado que la recogida tiene "graves deficiencias", que se van agravando a medida que se investigan, y ha anunciado que hoy se ha enviado un burofax a las tres empresas concesionarias comunicándoles formalmente lo que pasa y "haciéndoles responsables de cualquier avería que pueda haber en las instalaciones" y de los "cuantiosos daños".

También ha hecho referencia a la "posible judicialización" de este tema y ha explicado que el equipo municipal está ahora analizando si poner en marcha otras instalaciones o continuar con la recogida neumática.

Ahora, ha puntualizado, se abre una etapa de "negociación intensa con los responsables de la instalación" y Cort intentará restablecer en la medida de lo posible la recogida "con el menor coste posible", tanto de reparación como de funcionamiento.

La concejala del PSM-IV-ExM Marisol Fernández ha criticado que la recogida neumática acarreó un gasto de 400.000 euros en 2011 en reparaciones, cuando tiene una garantía de treinta años y lleva tan solo diez funcionando.

Ha recordado que instalar este sistema costó en su día 26 millones de euros y supone cientos de miles más cada año en reparaciones.

Cada año, ha indicado, supone un coste para el Ayuntamiento de tres millones de euros, dos sin contar el coste de instalación que aún está pagando el consistorio.

Para Fernández, la recogida neumática tiene un coste "insoportable". "Hay que dejar de una vez este sistema ruinoso y apostar por uno de futuro", ha apuntado la concejala, que ha apostado por una alternativa "adecuada a las condiciones del centro histórico y que sea similar al puerta a puerta".

Con este último sistema, ha opinado, se incrementa el reciclaje, mientras que los contenedores subterráneos actuales son como "un buzón anónimo donde la gente tira la basura y no se preocupa de su destino".

En cuanto a que el asunto vaya a juicio, ha apuntado que entonces se puede alargar "ni se sabe cuánto" cuando es necesaria "una respuesta inmediata".