La comisión de seguimiento de la ordenanza que regula la convivencia en los espacios públicos y prohíbe a los menores de 18 años el consumo de bebidas alcohólicas en la calle entre las 22.00 horas y las ocho de la mañana, el conocido como fenómeno del botellón, se reúne hoy por primera vez. Uno de los puntos que se tratarán en el orden del día será estudiar la inclusión o no de la Ruta Martiana y el Paseo Marítimo como zonas de intervención especial.

Una veintena de entidades ciudadanas, entre ellas el Consell de Juventud, la Federación de Hoteleros y las asociaciones de vecinos, representantes de los partidos políticos, junto a todas las áreas municipales implicadas en el desarrollo de esta normativa, como Juventud, Bienestar Social, Salud y Seguridad Ciudadana, forman parte de esta comisión.

La Concejalía de Seguridad Ciudadana ha elaborado informes policiales sobre la situación actual en estas dos zonas de Ciutat en las que habitualmente se producen grandes concentraciones de personas y se practica el botellón. Estos documentos incluyen las actuaciones que ha llevado a cabo la Policía Local en estos puntos y en ellos se basarán los miembros de la comisión para analizar y proponer las medidas que es posible adoptar. Sin embargo la decisión de incluir estas zonas como de actuación especial es de la junta de gobierno, que se reunirá el próximo miércoles.

Zonas de especial protección

La ordenanza reguladora de la convivencia en los espacios públicos establece que las zonas de intervención especial son aquellas con unas características específicas y en las que se produce una elevada concentración de personas.

En ellas no se podrá consumir alcohol en la calle a partir de las diez de la noche y la Policía Local podrá disolver cualquier grupo de personas que se forme en la vía pública tanto si se consume alcohol como si no lo hace.

Fuentes municipales aseguran que esta nueva normativa, que entró en vigor el mes de abril, es de aplicación en cualquier punto de la ciudad, aunque en el Paseo Marítimo y en la Ruta Martiana, el volumen de personas concentradas es más amplio. Si finalmente la junta de gobierno decidiera declarar estas dos zonas de intervención especial, se abriría un período de información a los ciudadanos, que podría prolongarse durante unas semanas, para que conocieran las características de este tipo de áreas urbanas. Además se aplicaría una señalización específica. Desde el consistorio señalan que el caso de la ruta martiana, que se celebra los martes en la zona de sa Gerreria y en la que los bares y establecimientos de restauración ofrecen tapas, es diferente al del Paseo Marítimo.

En ambos casos se producen aglomeraciones de personas pero en sa Gerreria tienen lugar un día a la semana. En todo caso, insisten en que es una decisión que debe adoptar la junta de gobierno, previo informe de la Policía Local y tras haberlo analizado la comisión de seguimiento, que se reúne hoy. De todos modos, el consistorio señala que si una vez definidas las zonas de especial protección las aglomeraciones de personas y la práctica del botellón se trasladan a otros puntos de la ciudad adoptarán medidas para que se cumpla la normativa igual que sucede en el resto de la ciudad.

La ordenanza que regula el civismo en los espacios públicos y las concentraciones de personas en la calle relacionadas con el consumo de alcohol, quedó aprobada por unanimidad en marzo con varios supuestos, entre ellos si deterioran la tranquilidad en el entorno y si hay menores concentrados bebiendo alcohol o consumiendo drogas.