La alcaldesa de Palma, Aina Calvo, ha convocado para el próximo lunes la junta general de accionistas de la Empresa Municipal d´Aigües i Clavegueram (Emaya) con el fin de solventar la situación "anómala" en la que se ha sumido la empresa tras la destitución de su actual presidenta, Cristina Cerdó, de sus cargos ejecutivos en Cort.

La propuesta, que tal como reconoció Calvo no está consensuada ni con el PP ni con UM, establece los criterios para al elección del presidente, vicepresidente, gerente y los vocales del consejo de administración de Emaya. "No es una propuesta de nombres", tal como advirtió la alcaldesa, quien manifestó que, en caso de aprobarse, se deberá convocar otra junta general para proceder a los nombramientos.

En síntesis, el titular del área a la que está asignada Emaya (en este caso el teniente de alcalde de Hacienda Andreu Alcover) asumiría la presidencia, mientras que el vicepresidente sería un experto propuesto por el PP.

El cargo de gerente sería ocupado por una persona independiente de reconocido prestigio. Según la alcaldesa, los vocales contemplarían la representación tanto de los grupos políticos como de la sociedad civil.

De esta forma, el Bloc propondría a un experto de reconocida competencia o concejal, otro experto sería nombrado a propuesta de UM (podría ser la concejala Cristina Cerdó), un técnico municipal propuesto por Infraestructuras, dos representantes de colegios profesionales y dos expertos a propuesta de las federaciones de vecinos. Calvo manifestó su convencimiento de que se trata de una propuesta "votable".