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Joan Gual: "La saturación hay que identificarla más con las colas de coches que con los cruceros"

El responsable de los puertos de Balears insiste que los cruceristas solo son dos millones de los 15 millones de turistas que visitan cada año el archipiélago

La entrevista del domingo: Joan Gual de Torrella

La entrevista del domingo: Joan Gual de Torrella

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La entrevista del domingo: Joan Gual de Torrella Alexander Cortés

¿Una protesta de cien personas contra la masificación turística

Es bueno que los ciudadanos hagan saber lo que piensan. Haya 2.000 o haya 90 personas es importante saber que hay una parte de la sociedad que siente una incomodidad por una determinada oferta turística. Tomamos nota.

¿Lo ve turismofobia?

No creo que exista la turismofobia. Se está usando esta palabra sin que haya un fenómeno para hablar de ello. Los cruceros son una parte de la oferta turística. Hay quien viene en avión, hay quien viene en ferry y pasa unos días y hay quien viene en crucero, visita la ciudad y se va. Es la suma de todos ellos lo que da 15 millones de turistas al año en Balears. Los cruceros sólo suponen 2 millones de esos turistas. Es un turista con un nivel de gasto superior, con una estancia más corta, que no consume territorio ni recursos. Tiene un impacto económico positivo y su impacto medioambiental lo estamos estudiando y no es tan malo como se pensaba. Seguramente por lo que llama la atención es porque llegan directamente a la ciudad y son muy visibles cuando están amarrados.

Lo que piden los colectivos que llevaron a cabo la protesta el pasado domingo es que debería ponerse límites a la llegada de cruceros que llegan a Palma.

Cada una de las islas tiene una capacidad determinada de amarre, que nunca se ha sobrepasado. Más allá de poner la infraestructura, nosotros no podemos hacer nada. Tienen que ser las autoridades competentes quienes pongan un límite de carga turística en Balears. Si se toma una decisión, en el aeropuerto como en el puerto, se tendrán que tomar las medidas para que lleguen menos turistas.

El alcalde de Palma, Antoni Noguera, dice que el actual número de cruceros no es sostenible

Esto se debe pedir a las navieras, que se sincronicen entre ellas, para evitar estas molestias que se pueden producir en Palma. El domingo, que llegó un crucero con 10.000 personas, grabé el casco antiguo y se ve un día normal. Cuando vemos una Palma abarrotada es por la suma de todos los turistas. Relacionarlos sólo con los cruceros es una equivocación. Si sólo hubiera cruceristas no veríamos saturación en Palma.

¿No está saturado el puerto?

No, el puerto está técnicamente perfectamente preparado para recibir seis cruceros, una cifra que sólo se ha dado una vez, el 3 de mayo de 2016. Ese día fui andando por Palma y no había saturación. Incluso los comerciantes lo dijeron. La saturación del centro de Palma hay que identificarla más que los cruceros, con las colas de coches en los aparcamientos del centro. Eso es un indicador.

Los cruceros vuelven a crecer este año. ¿Hasta cuándo?

Los incrementos de este año son fundamentalmente en temporada baja. Alargarán la temporada turística. Ya es muy difícil que crezcan en temporada alta. A partir de ahí, es evidente que cuando se recuperen destinos como Turquía, Egipto o Túnez, se equilibrarán los datos en Balears.

El actual Govern lamenta tener las manos atadas, al no tener competencia en puertos, y reclama que se le transfiera.

Soy presidente de una empresa pública estatal pero me nombra el Govern y es una fórmula híbrida fruto de un pacto político a la que le veo ventajas: equilibra bastante bien los intereses de las administraciones, que en el caso del Estado nunca es perjudicar a Balears.

Pese a que Europa ha ido restringiendo las emisiones de azufre de los cruceros, su contaminación sigue preocupando.

Hemos encargado a la UIB un estudio sobre el impacto económico de los cruceros y también sobre su impacto medioambiental, tanto de ruido como de emisiones. Cuando hay organizaciones que nos dan datos sobre ese impacto, nosotros lo que hacemos es pedirles que nos los faciliten para incorporarlos. Esta semana he escrito una carta al GOB para que nos faciliten unos datos que mencionaron sobre consumo eléctrico el día de su protesta. La industria de cruceros está haciendo una gran inversión a largo plazo y saben que a largo plazo ya no podrán ir con combustibles que no sean óptimos medioambientalmente. A día de hoy la foto es mejor que hace cinco años y en otros cinco será aún mejor, los barcos irán a gas y tendrán filtros de emisiones que hoy no tienen.

Una cosa que siempre ha sobrevolado es el posibles amarre de los cruceros frente a la Seu.

El último consejo de administración, en marzo, decidió que el futuro de la ordenación del puerto pasa por la especialización: el Moll Vell quedará destinado a la industria del mantenimiento; Pelaires, para los cruceros; y el Dique del Oeste, para los ferrys. En ningún momento se utiliza ni un palmo de las aguas exteriores del puerto de Palma, cuando, quiero recordar, hace cuatro años se presentó otro proyecto que planeaba convertir el Moll Vell en un área de ocio y comercial suponía construir un segundo dique del Oeste, a la altura de Cala Major.

¿Aprobarán ese nuevo plan director del Puerto de Palma en lo que queda de esta legislatura?

Estarán aprobadas las inversiones para poder llevar a cabo la reordenación. No hace falta el requisito de un plan director, ya que no se ampliará su superficie. Como es una obra interior no hace falta plan director. Los presupuestos del 2019 podrían incluir las inversiones para las obras de reordenación del puerto.

¿Es posible no aumentar la superficie del puerto de Palma cuando toda su actividad crece?

Nosotros planteamos el puerto a 30 años vista con la misma superficie. Los que vengan detrás ya pensarán y harán lo que quieran. Piense que cuando llegué, sobre la mesa tenía que se construía desde el Moll Vell hasta el Molinar, con una marina y beach clubs.

Algunas empresas de reparación náutica que ya operan en el Moll Vell ya están llevando su actividad a puertos fuera de Balears por falta de espacio.

Están previstos unos astilleros en Alcúdia y otros en Maó. Con una ampliación y otra será suficiente para que Balears tengan capacidad para afrontar la demanda del sector. Y hemos de pensar que hay que dejar vivir a los otros, el crecimiento no puede ser ilimitado. Hemos de pasar en todos los sentidos del crecimiento al desarrollo. Estamos en un momento histórico nuevo. El objetivo ya no es seguir creciendo, sino desarrollarse de una manera equilibrada.

Otro sector que convive en el puerto de Palma son los pescadores, que se sienten cada vez más arrinconados en el puerto.

Los pescadores son el sector más bien tratado por los puertos de Balears. Me gustaría que me explicaran en que consiste el maltrato. Es el sector más mimado.

La lista de espera para los amarres sigue sin reducirse.

Lo primero que hemos hecho es que una persona sólo pueda tener un amarre y después hemos hecho pública las listas para que el tiempo de espera sea transparente. A veces la lista de espera es larga porque la gente no se borra y no refleja la realidad. Más allá de esto, no habrá nuevos amarres.

Tienen pendiente el estudio de movilidad para reducir los carriles de circulación del Paseo Marítimo para un boulevard.

Al final de este mes ya tendremos el estudio, que evalúa el impacto de convertir una autovía en un paseo. Las ventajas son enormes, la cara de Palma se convertiría en un paseo, con tráfico, pero que no es una autopista. El Paseo Marítimo en 2019 ya podría empezar las obras. El estudio de movilidad no está para decir que no se haga, sino para hacer recomendaciones por el tráfico de coches.

Lo que será una realidad seguro es el aparcamiento del Moll Vell. ¿Para cuando las obras?

Hemos aprobados las bases para adjudicar las obras y en los próximos meses se elegirá la empresa y empezarán. Lo que hará esta obra es que los coches que ahora están en la superficie, que sea subterráneo. La Autoridad Portuaria lo que quiere ahora es rectificar los errores cometidos durante unos años demasiado desarrollistas que han supuesto que desde Portopí hasta el Moll Vell no haya un tramo libre. Ahora es el momento de que la zona portuaria sea para los ciudadanos.

Otra obra pendiente es la reforma del puerto del Molinar.

Antes de un año también deberían empezar las obras. Luego habrá que estudiar el proyecto de gestión que haga el Club Náutico, sea el actual o sea otro.

El actual Club Náutico tenía un proyecto muy diferente del que se llevará a cabo. ¿Cree que tiene sentido que ahora gestione una instalación que dista de lo que ellos proponían?

Efectivamente lo que ellos presentaban era una marina que no cabía, que hubiera tenido importantes consecuencias de movilidad en las calles del Molinar. Era inviable. Ahora habrá un puerto nuevo y seguro. Son una entidad consolidad y la ley les reconoce la opción de gestionar la instalación sin tener que ir a concurso.

Más allá de Palma, está el proyecto de Alcudiamar en el Puerto que sigue paralizado.

La Conselleria ha pedido un segundo informe de impacto ambiental. El primero dijo que no lo había y lo previsible es que el segundo diga lo mismo. Habrá cambiado que las obras en lugar de en 2017 acabarán siendo en 2020.

Uno de los artículos por los que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, amenaza con recurrir los presupuestos del Govern es por el cobro de la ecotasa en los cruceros. ¿Se le ha informado de los argumentos?

No, no. Pero lo que veo es que el impuesto turístico no ha tenido ninguna consecuencia sobre las ventas y por lo tanto no es disuasorio para visitar Balears. Creo que al ministro Montoro le conviene no quejarse de este tipo de impuestos y dejar hacer a las comunidades y que recauden y así no le planteen lo sustancial.

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