"Sacar el tema ante cualquier empresario hotelero es como mentar al diablo", afirma uno de los representantes del sector respecto a la búsqueda de un candidato que quiera asumir la presidencia de la Federación Hotelera de Mallorca en las elecciones previstas para diciembre. Por eso, son varios los que reconocen que se está apostando por dar un paso atrás y volver a poner la mirada sobre los que algunos denominan como "los Cuatro Fantásticos", es decir, las grandes cadenas Meliá, Riu, Iberostar y Barceló. Son ya muchas las voces que recuperan la posibilidad de que sea un alto ejecutivo de estas empresas quien sustituya a Inmaculada Benito, siguiendo el precedente que ya se marcó con Aurelio Vázquez.Aurelio Vázquez
La idea inicial era que al frente de la patronal mallorquina se pusiera de nuevo un empresario del sector, perteneciente a grupos de tamaño medio, sin retribución y con un papel más institucional que el desarrollado por Inmaculada Benito. Pero por ahora, ese esquema no funciona, ante la patente ausencia de candidatos.
Por ello, se mira de nuevo a las grandes cadenas para que asuman esa responsabilidad. De entre los denominados 'Cuatro Fantásticos', se reconoce que el perfil más idóneo sería el del copresidente del grupo que lleva su apellido, Simón Pedro Barceló, del que se señala que siempre ha optado por jugar un papel mucho más público que sus homólogos a lo largo de su vida profesional. Solo hay un problema: la mayoría de los hoteleros consultados duda de que quiera ponerse al frente de la patronal, pese a ocupar ahora ese cargo en la Agrupación de Cadenas Hoteleras.
Así que si las cabezas no quieren, la vista desciende hasta los altos cargos. En concreto, se plantea repetir la fórmula empleada cuando Aurelio Vázquez se puso al frente de esta organización empresarial: que esas grandes cadenas pongan a uno de sus directivos en la candidatura a la presidencia, cuyo salario sería el que recibe de esa empresa y no de la federación, una vez descartado contar con un presidente ejecutivo a sueldo, como era el caso de Benito.
Se destaca también la importancia que va a adquirir la figura del nuevo gerente, sobre el que se quiere descargar buena parte del peso del día a día en el trabajo de la patronal hotelera.Es decir, el problema ahora mismo es doble, por estar a la búsqueda de personas para ocupar ambos cargos.
La sombra de Benito
Uno de los problemas a la hora de buscar a un candidato a la presidencia es que, al retirar cualquier retribución para este cargo, debe de recaer en alguien que ya esté desarrollando un trabajo en una de las empresas del sector, sea su propietario o un directivo. Y con estas condiciones nadie quiere ofrecer la dedicación de Inmaculada Benito, que era capaz de enviar correos o mensajes al móvil a las 12 de la noche porque vivía volcada en el trabajo. Con un agravante: antes la federación hotelera jugaba un papel mucho más local, pero con la expresidenta la participación de esta patronal llegó también a foros estatales. No hay empresarios que estén dispuestos a semejante carga de trabajo "por amor al arte".
Algunos matizan este perfil, al afirmar que dedicar muchas horas al trabajo no significa conseguir buenos resultados, al tiempo que se cuestiona al equipo saliente por haber mantenido un papel muy "pro PP, lo que ahora estamos pagando frente al Govern y por haber impulsado una imagen muy negativa de los hoteleros, como un sector de una gran prepotencia y poco considerado con sus trabajadores.
Por ello, no se oculta que ahora habrá que limar algunas heridas abiertas, por ejemplo, con la negociación del convenio de hostelería: "sentó muy mal que a las 10 de la mañana del pasado jueves se nos quisieran dar los detalles del acuerdo alcanzado, cuando todos nos habíamos enterado horas antes a través de Diario de Mallorca".
