La Guardia Civil detuvo ayer a dos ciudadanos extranjeros en la Costa de Llucmajor sospechosos de haber arribado el pasado domingo a Mallorca a bordo de una embarcación tipo patera, que fue hallada varada en Cala Beltran, cerca de Cala Pi. Un amplio operativo de búsqueda se desplegó durante el domingo y ayer en la zona para localizar a otros ocupantes de la embarcación.

Según una nota de la delegación del Gobierno, a los dos detenidos se les vincula con el desembarco clandestino y hoy está previsto que pasen a disposición del juzgado de guardia de Palma.

La nota añadía que los sin papeles iban a ser trasladados a un Centro de Internamiento de Extranjeros (CITE) de la Península en el plazo de 72 horas.

Dos motores

La patera fue localizada por un ciudadano que alertó a las autoridades. La Guardia Civil desplegó un dispositivo en la zona y descubrió dos motores, uno sumergido y el otro en tierra firme, restos de ropa, alimentos y un bidón de combustible.

Tras comprobarse que se trataba de una patera, varias patrullas se desplegaron por tierra, mientras que un helicóptero sobrevoló la zona y una embarcación de la Guardia Civil peinó el mar.

El dispositivo permitió localizar a dos hombres sospechosos de haber llegado a bordo de la patera.

La barca localizada tiene unos 5 metros de eslora, es de fibra y de color blanco. Se sospecha que sus ocupantes agujeraron el casco para ocultar pruebas de su llegada ilegal a la isla. El Servicio Marítimo de la Guardia Civil remolcó la patera hasta el Club Náutico de s'Estanyol. Los primeros indicios llevaron a pensar que en la barca hundida habían viajado entre seis y ocho personas.

La Guardia Civil aventuró también que el desembarco se había podido producir en la madrugada del domingo, pero en la zona no había ni rastro de los sin papeles.

El pasado 1 de enero se detectó otra patera en la zona de Cala Pi, también en Llucmajor.

La Guardia Civil arrestó, también entre un domingo y un lunes, a nueve argelinos en Llucmajor que habían desembarcado en Mallorca horas antes a bordo de una patera. Uno de los presuntos ilegales presentaba signos de hipotermia y fue trasladado al hospital de Son Espases, donde fue dado de alta tras ser atendido.

Según un nota oficial de la delegación de Gobierno, la Guardia Civil interceptó a nueve ciudadanos extranjeros en la costa de Llucmajor que, presuntamente, habían entrado en España de forma ilegal.

Con anterioridad una patrulla de la Guardia Civil había localizado una embarcación tipo patera entre Cala Pi y Cap Blanc.

Los nueve extranjeros fueron puestos a disposición del Cuerpo Nacional de Policía, el encargado de tramitar las órdenes de expulsión de los sin papeles y de custodiarlos hasta su salida de España.

Nada más localizarse la embarcación la Guardia Civil desplegó también un dispositivo de reconocimiento en la zona que permitió encontrar poco después a un primer varón extranjero mientras caminaba por la carretera de S'Estanyol. Entre la tarde del domingo y la madrugada del lunes fueron localizados los otros 8 varones (uno de ellos fue trasladado a Son Espases por hipotermia y dado de alta poco después).

Seis metros de eslora

La embarcación localizada tenía unos 6 metros de eslora y contaba con un motor de 30 CV. En 2016 llegaron a las islas tres embarcaciones de similares características; tres en 2015 y dos en 2014

Varias de estas pateras estaban ocupadas por argelinos y procedían del puerto de Dellys, una localidad pesquera del norte de su país que suele ser el punto de salida de las barcas que llegan a Balears.

La Guardia Civil practicó detenciones en tierra de presuntos ilegales.