La Mesa del Parlament que debía decidir la destitución de Xelo Huertas como presidenta de la Cámara ha quedado suspendida al cuarto de hora de comenzar, cuando Huertas y el PP se han levantado y abandonadola sesión argumentando que el vicepresidente, el socialista Vicenç Thomàs, disponía de documentación de la letrada con la que el resto de la Mesa no contaba.

Thomàs ha negado esta versión y ha explicado que ayer Huertas comunicó a la letrada que se inhibiría en la sesión de hoy, por lo que correspondia al vicepresidente dirigirla. Así, Thomàs ha preguntado a la letrada los pasos a seguir una vez que la Mesa aceptara el escrito de Podemos de expulsión de Huertas y la diputada Montserrat Seijas, algo que según él no es un informe, sino una sucesión de los actos reglados que hay que adoptar en esa situación y una documentación de la que dispone siempre el encargado de dirigir la sesión de la Mesa.

Huertas, sin embargo, ha considerado que esta situación conculcaba sus "derechos fundamentales" y ha negado que hubiera dicho a la letrada que se inhibiría como presidenta, sino "solo en los puntos" que le afectaran. Para Thomàs y Joana Aina Campomar (Més) la actitud de PP y Huertas supone "prevaricar" al negarse a hacer cumplir el Reglamento de la Cámara, que tiene rango de Ley y establece que cuando un miembro de la Mesa es apartado de su grupo parlamentario deja de pertenecer al máximo organo de gobierno del Parlament. "Igual los que prevarican son ellos", ha replicado Huertas quien les ha retado a acudir a los tribunales.

Miquel Jerez, del PP; también ha hablado en términos de "indefensión" y ha rechazado la acusación de Vicenç de que el PP y Huertas se hubieran puesto de acuerdo para bloquear la institución. Aunque Thomàs ha afirmado que tiene dudas respecto a si Huertas sigue siendo la presidenta del Parlament, esta tiene claro que por ahora continua al frente de la Cámara.