Xelo Huertas realizó ayer su por ahora último movimiento para mantener la presidencia del Parlament tras su expulsión de Podemos. "No voy a presentar mi renuncia", declaraba ayer Huertas tajantemente poco antes de las 2 de la tarde, hora en la que se cerraba el registro de la Cámara balear. Minutos después, y ante la estupefacción de los partidos del Pacto, Huertas registraba un escrito en el que pedía oficialmente a la Mesa del Parlament, que se reunirá esta mañana para decidir, que "no adopte ningún acuerdo" hasta que los tribunales "resuelvan" sobre la demanda que interpuso contra Podemos el pasado día 4, en la que pide que anule su expulsión del partido y que, mientras decide, la deje en suspenso como medida cautelar.

En su escrito a la Mesa, Huertas considera que la aplicación directa del artículo del Reglamento del Parlament que determina el cese de cualquier miembro de la Mesa si deja de pertenecer a su grupo parlamentario, podría afectar en su caso a sus "derechos fundamentales" si se ejecuta antes de que los tribunales se pronuncien sobre su demanda. De este modo, intenta frenar su expulsión del cargo con una iniciativa que cogió por sorpresa a los partidos del Pacto ya que, aunque no tenían claras las intenciones de Huertas cuando anunció que convocaría la Mesa para hoy, desconocían qué podía argumentar para mantenerse en el cargo.

"Nos conduce a una situación realmente delirante", dijo la portavoz parlamentaria de Podemos, Laura Camargo, quien emplazó a "esta persona" (Huertas) a que "no trastoque por más tiempo la normalidad" de la primera institución política de Balears. El portavoz de Més, David Abril, sostuvo que, a pesar de este escrito, "la convocatoria de la Mesa es su último acto administrativo".

Bel Oliver, del PSIB, se expresó en el mismo sentido e insistió en que hoy a la Mesa solo le corresponde hacer efectiva la destitución de Huertas como presidenta. "Es un acto reglado que no admite discusión", dijo Oliver. El socialista Vicenç Thomàs, vicepresidente primero del Parlament, asumiría la presidencia de manera temporal hasta que se decida quién ocupará el cargo, para lo cual los partidos del Pacto se han marcado como fecha el 7 de febrero.

Huertas se reúne con el PP

Al PP, sin embargo, no le sorprendió el movimiento de Huertas. La portavoz parlamentaria popular, Marga Prohens, y el secretario segundo de la mesa, Miquel Jerez, se habían reunido por la mañana con la presidenta del Parlament, un encuentro que Prohens justificó en que, pasada la 1 de la tarde, aún no se había convocado formalmente a la Mesa y querían aclarar si se celebraría. Tras esta reunión, Prohens declaró que "las dudas jurídicas" que tenían los populares "han aumentado" con el escrito de Huertas. Por ello, el PP quiere que en la reunión de la Mesa de hoy los letrados del Parlament aclaren estas cuestiones. "No decidiremos ni participaremos en ninguna votación si no tenemos claro que hacemos lo correcto", dijo la portavoz popular.

La portavoz parlamentaria de Podemos pidió a todos los partidos, aunque con la mirada puesta en el PP, "responsabilidad y altura de miras" para que hoy apliquen el Reglamento y destituyan a Huertas, a la que además pidió que deje el escaño.