El Consell de Mallorca, a través de la Agencia de Disciplina Urbanística (ADU), no escatimará esfuerzos ni fuentes de información para poder cazar a los infractores que construyan de forma irregular en el campo mallorquín. Es por ello que incluso utilizará fotos y vídeos aéreos para detectar las irregularidades. Estas iniciativas están incluidas en el Plan de Inspección Urbanística, aprobado esta semana por el departamento insular de Territorio que dirige Mercedes Garrido.
El objetivo de este plan es "programar y coordinar las actuaciones inspectoras en el control de las infracciones en materia de disciplina urbanística". El documento también contempla, tal y como ya adelantó este periódico el pasado mes de febrero, la denuncia ante la Fiscalía de Medio Ambiente de las construcciones ilegales en suelo protegido.
Los inspectores de la ADU podrán actuar de oficio cuando adviertan una irregularidad. Hay que recordar que el Consell, básicamente, tiene la competencia urbanística en suelo rústico. El suelo urbano responsabilidad de los ayuntamientos. Este plan es el instrumento que los técnicos e inspectores necesitaban para poder actuar ante cualquier irregularidad. Establece toda una serie de fuentes de información para acometer la función inspectora y abrir un expediente sancionador.
En este apartado es donde se detalla que se podrán utilizar "fotos y vídeos aéreos, tanto de carácter público como privado, siempre que las imágenes hayan sido obtenidas respetando la normativa aplicable". Mediante estas imágenes, los técnicos podrán comprobar las nuevas edificaciones que se han levantado y contrastar si contienen las correspondientes licencias, si disponen de la parcela mínima necesaria y si la construcción respeta los parámetros establecidos por los planeamientos urbanísticos.
Bartomeu Tugores, responsable de la ADU, y Mercedes Garrido detallaron que también los inspectores tendrán, por primera vez, a su disposición de toda la información del departamento de Territorio. De esta forma, contarán con la documentación de las obras denegadas o archivas en suelo rústico por el Consell, para comprobar si los promotores han cumplido o no estas denegaciones. De igual modo, se analizarán las resoluciones de la Comisión Balear de Medio Ambiente para contrastar si las actuaciones en suelo protegido siguen los parámetros aprobados.
Por otra parte, la Agencia de Disciplina Urbanística ha decidido denunciar ante la Fiscalía todas aquellas obras ilegales de envergadura edificadas en áreas protegidas por la Ley de Espacios Naturales (LEN). El Plan de Inspección Urbanística aprobado esta semana así lo contempla.
Durante las últimas legislaturas el Consell de Mallorca no ha llevado ante la Justicia a ninguna de estas construcciones, pese a que sus promotores hubieran podido incurrir en un delito contra el medio ambiente. Desde el departamento insular de Territorio apuntan que remitir estos expedientes a la Fiscalía para que investigue si hay delito es una cuestión de "voluntad política".
Cada año se detectan del orden de unas 50 infracciones en zonas protegidas de Mallorca. El 47% de ellas son por falta de licencia, ya que en la mayoría de los casos se trata de edificaciones realizadas en lugares donde está prohibidio construir. Es por ello que se podría estar cometiendo un delito contra el medio ambiente. La ofensiva de la ADU contra el urbanismo ilegal también tendrá incidencia en el suelo protegido. Por este motivo, lo más probable es que el número de infracciones superen con creces las 50 anuales.
