El Consell de Mallorca aprobará este viernes el plan anual de inspección urbanística, tras cinco años sin contar con ninguno, que prevé acciones "concretas y contundentes" desde la "objetividad y transparencia" con el fin de sancionar, en especial, las infracciones en suelo rústico protegido de la isla.

La consellera insular de Territorio e Infraestructuras, Mercedes Garrido, y el gerente de la Agencia de Disciplina Urbanística, Bartomeu Tugores, han presentado hoy en rueda de prensa este plan de inspección urbanística, que incluye por primera vez la planificación de la tramitación de los expedientes de infracción urbanística.

Uno de los objetivos, además de controlar estas infracciones, es agilizar los trámites de más de 1.000 expedientes que están pendientes, de los 1.200 que encontró el actual gobierno insular.

"Estamos para salvaguardar el territorio, el medio ambiente y esta es la manera que tenemos", ha apuntado Garrido, quien ha añadido que hasta ahora el Consell de Mallorca no ha llevado ningún expediente a la Fiscalía, como marca la ley en el caso de infracción de la ley de ordenación del territorio.

Para llevar a cabo el plan de inspección se prevé que a lo largo de este año se incorporen hasta 12 personas, de las cuales ya trabajan 5, y cuyos salarios saldrán de lo que logre recaudar la Agencia de Disciplina Urbanística, que ha estado en la última legislatura en estado de "semiletargo", según la consellera insular. Ambos han destacado el hecho de que este plan se debe aprobar anualmente, pero en los últimos cinco no se dio el visto bueno a ninguno.

La planificación, que hasta ahora no estaba prevista y se incluye, permite marcar cómo se deben tramitar los expedientes de las infracciones que detecten los inspectores y es necesaria porque los términos de prescripción de las infracciones se han reducido con la ley del suelo de 2014.

Debido a la gran cantidad de expedientes pendientes de gestionar el plan obliga a marcar criterios a la hora de su tramitación.

Tugores ha subrayado que el plan marca criterios de transparencia, objetividad y eficacia en la labor de la Agencia de Disciplina Urbanísticas, que será informada por el departamento de Territorio e Infraestructuras, de denegaciones y de archivos de solicitudes de declaración de interés general en suelo rústico.

Además, de las denegaciones de cédulas de habitabilidad en suelo rústico, cuando haya indicio de obras ejecutadas sin licencia, y los informes desfavorables sobre viviendas unifamiliares en la misma categoría, cuando se trate de legalizaciones de viviendas ejecutadas sin licencia.

El plan prevé evitar las edificaciones ilegales en suelo rústico, y sancionar antes de que se terminen estas obras, cuando es más fácil demoler, por lo que la Agencia debe actuar de forma "inmediata", porque una vez concluidas es más complicado, ha manifestado Tugores.

Se prevé la transparencia de las fuentes de información que permiten avanzar en la inspección de obras, ya que la mayoría son denuncias de particulares.

La fase de planificación busca establecer un orden de tramitación de expedientes, dando prioridad a las infracciones que prescriben pronto, ya que hasta ahora la agencia no tenía conocimiento de estas fechas.

Tugores ha resaltado la necesidad de establecer criterios a la hora de enviar un expediente a Fiscalía ante un posible delito de ordenación del territorio, ya que si se detecta es obligatorio informar al Ministerio fiscal.

Calcular los ingresos que se puede obtener de las infracciones urbanísticas actuales es difícil, ha señalado la consellera insular, ya la sanción depende del estado, y puede ir desde el 10 % del coste de lo obra si no se ha concluido, del 20 % si está terminada; fuera de periodo ordinario del 100 %, y del 150 % en el caso de sanciones coercitivas.

El Consell de Mallorca busca darle publicidad a este plan de inspección para que los posibles infractores sepan a qué atenerse y sobre todo que se les controlará.