Abrir el debate en profundidad sobre cuál debe ser el modelo económico de Balears, "hoy demasiado centrado en el turismo". Fue la demanda de Miquel Ensenyat, que fue el encargado de clausurar ayer tarde el nuevo Foro de Tendencias Empresariales de Mallorca en el Club de este diario.
El presidente del Consell de Mallorca alertó sobre las consecuencias de futuro para la Comunidad y especialmente para la isla de una economía focalizada casi exclusivamente en la actividad turística. Ensenyat explicó que en su reciente viaje a Quíos, desbordada por la crisis de los refugiados sirios que huyen de la guerra, comprobó in situ el impacto del drama humanitario en la isla griega. "La caída del turismo ha sido del 60 por ciento, por suerte ellos tienen cierta actividad agraria, de armadores... y han podido resistir", apuntó.
"¿Qué nos hubiera pasado en Mallorca?", preguntó en voz alta Ensenyat de producirse una situación así. "Hubiera sido un auténtico drama", respondió.
Mallorca, mucho por ofrecer
Por todo ello, el máximo responsable político de la institución insular llamó a las administraciones -incluyéndose- y al sector a abordar el debate "sobre cómo diversificar nuestro modelo económico y social". Ensenyat defendió que "hacemos cosas muy interesantes en Mallorca", más allá del producto exclusivamente turístico, reivindicó. Cabe recordar que el 1 de enero de 2019 la institución insular asumirá la competencia en ordenación turística.
"Es importante que haya espacios donde puedan fluir ideas, debatir, intercambiar opiniones...", celebró Miquel Ensenyat la organización del Foro, partidario de "llegar a consensos".
El presidente del Consell parafraseó a uno de los ponentes que le precedieron, el consultor turístico Domènec Biosca -"el fracaso es no saber adelantarse a los cambios"-, para arengar a los presentes: "Es importante que nos sepamos adelantar a los cambios que vienen". Ensenyat hizo un discurso muy breve, bromeando que "todo lo que dura más de dos minutos cansa, el público empieza a bostezar". Con su estilo directo buscó lanzar un mensaje a los empresarios y políticos que llenaban el auditorio.
El presidente del Consell recurrió a otra anécdota personal, un viaje para hacer el Camino de Santiago, durante el cual visitó la catedral de Burgos con un guía emocionado que preguntó al grupo qué templo catedralicio "les parece más bonito". El propio guía respondió a la cuestión: "A cada uno el suyo", admitió Ensenyat, que estaba pensando en ese momento en la Seu de Mallorca.
Utilizó el ejemplo para enfatizar nuevamente el potencial de Balears como marca en aras a potenciar otros sectores complementarios a la actividad turística.
