Aunque medios de comunicación como Diario de Mallorca han denunciando muchas veces en la isla la explotación laboral que afecta a algunos hoteles y negocios hosteleros, la emisión en Alemania, en horario de máxima audiencia, de un reportaje televisivo sobre los abusos laborales en Mallorca preocupa en el Govern, por el impacto turístico y por la persistencia de políticas laborales al margen de la ley. “Cualquier información negativa puede hacer daño [al destino Mallorca], pero lo que no podemos hacer es ocultarlo, sino poner todos los medios para que estas situaciones de explotación no se produzcan”, zanja el vicepresident.

“El Govern, desde el primer día, se ha mostrado sensible con la situación de los trabajadores de todos los sectores, y especialmente del hostelero, uno de los que más personas emplea y en el que más precariedad hay en este momento. Llevamos tiempo denunciando que hay situaciones de este tipo, por ejemplo en el caso de trabajadoras que hacen más horas y habitaciones de las que humanamente es posible”, criticaba Barceló, que luego se lo repetía a los empresarios del lobby Exceltur, pidiendo su ayuda para poner coto a la explotación, denunciada por su partido (Més) en campaña. Lo hacía ayer también Podemos, cuya diputada Laura Camargo, pedía en redes sociales que se apruebe la jubilación anticipada para profesionales tan castigadas como las camareras de piso. Solo le queda llevarlo al Parlament.