Més per Mallorca y la Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (Pimem) salieron ayer en defensa de la ley balear de comercio. Estas instituciones coinciden con el Govern de que este recurso "es una agresión inaceptable al modelo comercial y a toda la ciudadanía de Balears".

El portavoz parlamentario de Més per Mallorca, David Abril, añadió que el hecho de que el Gobierno central haya presentado el recurso ahora, justo después del cambio de Govern y no antes, "solo se puede entender como una voluntad de castigo político al nuevo Govern de izquierdas".

Abril avanzó que el próximo lunes trasladará al resto de portavoces parlamentarios la propuesta de consensuar una declaración institucional para que el plenario de Parlament, el próximo martes, condene esta injerencia de Gobierno y se manifieste de manera unánime a favor de ejercer estas competencias para defender el modelo comercial propio de la comunidad de Balears.

Pimem, por su parte, "cree que el Gobierno central alimenta, una vez más, la discordia". La Federación de Pequeña y Mediana Empresa achaca al Partido Popular su mala gestión en cuanto a materia de comercio y espera, que el nuevo Govern, actúe a favor de este colectivo.Según el presidente de Pimem, esta ley comercial responde a una demanda de los propios empresarios de Balears. "Una ley transversal y con impacto que favorece a la protección del archipiélago".

Una necesidad que Pimem ha calificado como esencial para la seguridad de la superficie de las islas, un territorio que "requiere de una regulación autonómica adaptada a la realidad socioeconómica de cada isla". La ley estatal, en cambio, no contempla este aspecto.