El enquistamiento del conflicto educativo entre Govern y profesorado y asociaciones de padres y madres de alumnos ha provocado que el 76% de la población balear no vea posible llegar a un consenso que lo solucione, según refleja la última encuesta de Quaderns Gadeso en la que un 11% de los consultados opinó que el conflicto sí tiene solución.

Del 76% que piensa lo contrario, más de la mitad, el 53% de los consultados, responsabilizó al Govern de José Ramón Bauzá de esta situación, el 26% culpó a las posturas de la Assemblea de Docents, el 8% a los sindicatos, el 7% a los partidos de la oposición, el 5% a la conjunción de todos los actores y, por último, un1% declinó contestar a esta cuestión.

La ciudadanía se mostró en este sondeo mayoritariamente en contra de casi todas las medidas adoptadas por el Govern Bauzá. Así, el 73% de los consultados está en desacuerdo con la reducción del número de profesores acometida por este Ejecutivo autonómico y tan solo el 17% se mostró a favor; el 69% deploró que se haya aumentado las ratios de las aulas (más alumnos) mientra el 19% lo consideró intrascendente; más de la mitad se mostró en contra de la disminución acometida entre el profesorado de apoyo para atender la diversidad (51%), mientras que el 27% se declaró a favor de ella.

En lo que atañe a la aplicación del Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL), el 46% de los sondeados se mostró en desacuerdo frente a un 33% que se declaró partidario de este decreto y un 21% que optó por no contestar a esta pregunta.

En lo que respecta a las medidas adoptadas por la comunidad educativa, la idea barajada, que no aplicada, de dar un aprobado general fue rechazada por ocho de cada diez encuestados; la huelga de hambre de Jaume Sastre también fue vista con desagrado por el 51% y tan solo un 17% aprobó esta medida para intentar forzar al Govern a una negociación; no aprobar los proyectos del TIL en los centros escolares suscitó más apoyos (40%) que rechazos (39%), mientras que la huelga de los profesores estuvo bien vista por el 49% de los sondeados y mientras que el 37% se mostró en desacuerdo.

Dejando de lado el conflicto puntual por la aplicación del TIL, el 91% de los consultados colocaron al fracaso y al abandono escolar como el principal problema del sistema educativo balear; el 86% opinó que el mayor déficit educacional es la poca relación entre lo que se enseña en las aulas y lo que demanda el mundo laboral. El 58% creyó que el principal problema hay que atribuirlo a la falta de recursos e inversión, el 31% a la masificación de los centros y a los ratios de alumnos por aula y el 29% a la falta de disciplina observada en los centros escolares.

La toma de conciencia de la importancia de recibir una buena educación va creciendo entre los baleares ya que si en el año 2009 esta percepción era de 5,5 sobre diez, en estos momentos es de 7,1. De la misma manera, disminuye el grado de satisfacción por la formación que reciben los hijos al pasar de un 4,5 sobre 10 en 2009 a un preocupante 3,6 en esta última encuesta.

Entre los factores determinantes que han llevado a aumentar la percepción de la importancia de una buena educación, el 94% cree que esta circunstancia mejora las posibilidades de encontrar un buen trabajo, el 53% porque es imprescindible para el desarrollo personal, el 41% porque es necesaria para aprender a convivir con los otros y el 39% porque permite desarrollar el valor del esfuerzo.

Por último, los motivos del descenso en el grado de satisfacción de los ciudadanos por la educación que reciben sus hijos son, para el 90% de los consultados, que no siempre lo que se enseña en la escuela es útil para la vida laboral, el 78% lo atribuye a la masificación de los centros escolares y a la falta de disciplina, el 50% a que "nuestro sistema educativo se encuentra desfasado" y el 29% a que los maestros no se implican en la formación del alumnado.