Los jefes de servicio de Son Espases han remitido una carta al director del hospital de referencia en la que rechazan de plano que la ampliación de jornada a 37,5 horas semanales que entrará en vigor a partir del 1 de julio se concentre en el horario matutino del sábado.

La intención de la Administración con esta medida sería ahorrarse el pago de las primeras horas de una guardia médica que cayera en sábado, que se empezaría a contabilizar como tal a partir de las tres de la tarde y no desde las ocho de la mañana como se hacía hasta el momento.

"Desde las ocho de la mañana hasta las tres de la tarde les contaría como horario ordinario y sólo partir de esa hora se empezaría a remunerar su trabajo como horas efectivas de guardia", denunciaba ayer el portavoz del Sindicato Médico Miguel Lázaro, que también cuantificó el dinero que van a perder los facultativos con esta nueva medida lesiva para sus intereses económicos: 224 euros menos en cada nómina.

Según reveló Lázaro, los treinta jefes de servicio del hospital de referencia de esta comunidad se reunieron el pasado martes y consensuaron una nueva misiva lamentando y rechazando esta medida que ya ha sido remitida al director gerente de Son Espases, Juan Sanz.

El portavoz sindical advirtió que la crispación entre los facultativos crece día a día con medidas como ésta y explicó que en la carta remitida a Sanz los jefes de servicio exigen que el aumento de la jornada semanal en dos horas y media a partir del primero de julio se aplique linealmente, de lunes a viernes, ampliando su horario en media hora cada día y no concentrando este aumento de jornada en la mañana del sábado con el único objetivo de ahorrarse dinero en el pago de las guardias médicas de fin de semana.

Por todo ello, los responsables de los diferentes servicios han recalcado que no piensan transigir con este nuevo recorte salarial encubierto y que sólo realizarán las guardias, tanto las de presencia física como las localizadas, de ocho de la mañana a ocho de la mañana del día siguiente.

"La indignación entre los responsables médicos crece cada día, sobre todo cuando ni siquiera se han tenido en cuenta las propuestas que han hecho para ganar en eficiencia. Por eso, una dimisión en bloque a partir del día 5 de julio no hay que descartarla si la Administración no arregla esta situación", advirtió Lázaro.