La pieza separada secreta del caso Palma Arena donde se investiga una supuesta trama de desvío de fondos públicos, prevaricación, fraude a la Administración y otros delitos en torno al "grupo" de empresas Nóos, liderado por Iñaki Urdangarín, duque de Palma, cuenta ya con 9 imputados y unos 15 implicados.

Las personas que han sido imputadas por el juez José Castro, el Grupo de Delitos Económicos de la Policía y la fiscalía anticorrupción son 5 exaltos cargos del Govern de Jaume Matas, 3 antiguos directivos de organismos públicos de la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia, y Diego Torres, exgerente y mano derecha de Urdangarín en el conglomerado Nóos.

Los excargos del Govern de Matas imputados son: Pepote Ballester, director general de Deportes; Juan Carlos Alía y Raimundo Alabern, gerentes del Ibatur; Miquel Ángel Bonet, asesor jurídico y secretario del Ibatur; y Gonzalo Bernal, director de la Fundació Illesport.

Los investigadores también han tomado declaración, como testigos, a varias decenas de personas: funcionarios y técnicos de la Generalitat y Govern; Dulce Linares, exjefa de Gabinete de Matas; los empresarios valencianos Francisco y Fernando Roig, vinculados al Valencia y al Villarreal; exdirectivos de ese club; proveedores diversos de los 5 foros organizados por Urdangarín con fondos públicos; trabajadores del "grupo" Nóos, etc, etc.

El duque de Palma y Jaume Matas, tienen, al igual que otras 13 personas del entorno del primero, la condición de implicados en el sumario. El juez José Castro deberá decidir, una vez levantado el secreto de sumario y estudiada la abundante documentación intervenida en Valencia, Barcelona y Palma, si cita como imputados a algunos o todos de esos 15.

El encausamiento de Urdangarín y Matas se da por hecho: solamente cabe poner la fecha. Castro también podría citar como encausados a los exconsellers de Matas Joan Flaquer y Rosa Puig.