Hacía tiempo que se venía diciendo: si sigue habiendo recortes, habrá que poner topes al número de alumnos. Y así ha sido, por segundo curso consecutivo. Según aprobó la Universitat la semana pasada, el curso 2011/2012 un total de 22 estudios tendrán límite de plazas, siete más que este curso.

Aquellos que quieran estudiar Bioquímica; Biología; Economía; Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural; Ingeniería Electrónica Industrial y Automática; Ingeniería Informática o Ingeniería Telemática tendrán que esmerararse en sacar buena nota en las pruebas de acceso pues a partir del curso que viene no habrá sitio para todo el que quiera seguir estos estudios.

¿Por qué? La respuesta es la de siempre: la crisis y el consecuente recorte presupuestario que el Govern ha aplicado a la Universitat, institución que este año tiene que lidiar con un 7,5% menos de euros que el año anterior. La ecuación se complica al comprobar que mientras el presupuesto baja, las matriculaciones suben: este año ha aumentado un 13% el número de estudiantes. El más difícil todavía llega de la mano de Europa, pues el Plan Bolonia implica grupos más reducidos, más tutorías y un seguimiento más cercano de cada alumno.

"No podemos hacer nada más", se resigna el vicerrector de Estudiantes y Campus, Cels García, "es una cuestión de falta de infraestructuras y recursos humanos". Desde el rectorado son conscientes de que restringir el acceso en más estudios puede implicar la marcha de más estudiantes a centros de educación superior de la península. De hecho, este curso se ha producido un aumento del 10% de estas ´fugas académicas´, algo que se achacó en su día a los numerus clausus impuestos por primera vez este curso en Derecho, Estudios Ingleses (lo que antes se conocía por Filología Inglesa) y Trabajo Social.

"La UIB ha llegado a su techo", dice García, "y además ha aumentado el número de personas que vienen de la península a estudiar aquí, sobre todo en Enfermería y Fisioterapia", añade. Cabe destacar que la mitad de los estudiantes de Fisioterapia de este curso son de fuera de Balears.

Además de frenar el libre acceso en siete estudios, en otros que ya tenían límite de plazas se han restringido mucho más. Es el caso por ejemplo de Administración de Empresas. Hasta este curso, podían matricularse en 1º hasta 360 estudiantes. A partir del próximo septiembre, sólo podrán acceder 280 (8o menos). En Psicología se han quitado diez plazas, porque lo han demandado desde la propia facultad. Por el contrario, en Ingeniería de la Edificación (antes Arquitectura Técnica) se permitirá que se matriculen diez alumnos más porque se ha calculado que es algo asumible.

Fijándose en los datos de matrícula de este año, se puede aventurar que en algunos estudios no habrá tanta competencia, como por ejemplo en Ingeniería Agroalimentaria: este año se matricularon 58 alumnos y el curso que viene sólo podrán ser 50. En otros títulos, los alumnos lo tendrán más complicado a juzgar por la demanda. Un caso llamativo es el de Ingeniería Electrónica Industrial y Automática: este curso ingresaron 129 estudiantes nuevos y el que viene no podrán ser más de 60.

Nueve títulos de la UIB se mantienen sin ningún tipo de tope: Física, Filosofía, Geografía, Historia, Historia del Arte, Matemáticas, Lengua y Literatura Castellana y también Catalana, Matemáticas y por último Química. En el caso de Derecho, los alumnos que no entren en el campus de Palma tendrán la opción de marcharse a Menorca o Eivissa, donde los estudios jurídicos permanecen abiertos a todos.