Las patronales del comercio balear pidieron que la ley sectorial "no sea desvirtuada" durante su tramitación parlamentaria, que actualmente se encuentra en fase de debate de enmiendas, ya que el borrador que debate hoy la Comisión de Economía "disfruta del consenso y del apoyo" de esas entidades, que no desean que se modifique "en su filosofía ni en su contenido", afirmaron.
Y, para asegurarse de ello, Pimeco, Afedeco, Ascome y Pimeef-Comercio recabaron la colaboración de un diputado del Bloc, Biel Barceló, para que leyera a los representantes de los distintos grupos parlamentarios durante el encuentro un texto consensuado por esas patronales, en el que precisan que, en su redacción actual, la futura Ley de Comercio "recoge un marco normativo adecuado a la realidad" comercial balear.
Esa legislación, que debe estar aprobada antes del próximo 31 de diciembre --porque en 2010 entra en vigor la Directiva Europea de Servicios-- está actualmente "ajustada a las dimensiones del territorio y de la población de cada una de nuestras Islas", precisaron las organizaciones empresariales; que se vieron obligadas a recurrir a Barceló ante la imposibilidad reglamentaria de dirigirse sus representantes al Parlament.
Según precisan en el documento leído esta mañana en la Cámara, las patronales trabajaron intensamente, en colaboración con la Conselleria de Comercio, Industria y Comercio, para conseguir que la transposición de la también conocida como 'Directiva Bolkestein' al marco legislativo autonómico "sea una oportunidad de futuro para el comercio tradicional, y ubicado en la red urbana", una circunstancia que buscan trasladar a los ciudadanos.
Ante todo, para las patronales del sector, la nueva legislación "ofrece una oportunidad de ordenar" la actividad comercial en Baleares. Y, al mismo tiempo, la aplicación de la Directiva Europea debe "garantizar la elección de los consumidores". Algo que "sólo se puede cumplir si existe un equilibrio de formatos comerciales a nuestras islas", precisaron en el documento leído hoy en el Parlament.
Este aspecto, que admitieron que ha generado "controversia", se trata de un "requisito imprescindible" para que los clientes del comercio puedan ejercer su "indiscutible libertad" como consumidores. Y, de hecho, consideraron que la transposición que debate la Comisión de Economía, "será positiva por todo el mundo: clientas y comerciantes" en el caso de que sea finalmente aprobada como está.
CONSTANCIA EN EL BOLETÍN
Cabe precisar que, la lectura del documento por parte del diputado Biel Barceló --cuya coalición, el Bloc, dirige la Conselleria de Comercio-- permitirá que el posicionamiento de todas las patronales de las islas quede plasmado en el Boletín Oficial del Parlament, que recoge los debates de las distintas sesiones, dejando constancia de los mismos.
En total, el borrador de la Ley de Comercio autonómica recibió 29 enmiendas, ninguna de ellas 'de devolución' --a la totalidad del texto--, de las que 20 corresponden al Grupo Parlamentario Popular, que centra sus propuestas de modificación en lo farragoso que resulta el texto en algunos aspectos, así como en agilizar la tramitación necesaria para abrir nuevos establecimientos.
