La Asociación de Padres de Familia Separados de Baleares (APFS) se concentró ayer en la en la Plaza de Cort en apoyo de un policía local de Palma divorciado y padre de un niño "acusado falsamente por maltrato en el ámbito familiar". El funcionario ha sido condenado a diez meses de prisión y 31 días de trabajos para la comunidad.

El presidente de APFS, Jorge Skibinsky, aseguró ayer que el menor ha sido "maltratado por su madre". Skibinsky criticó que la denuncia de la mujer "prevalece sobre los 18 años de servicio intachable".

Según la denuncia de APFS, los hechos se originaron cuando el agente, especializado en intervenciones de mediación social y familiar, "acudió en dos ocasiones para proteger a su propio hijo cuando consideró que su seguridad corría peligro al ser maltratado por su madre".

Los padres separados denunciaron que el funcionario "fue agredido por su ex pareja en presencia del menor y, posteriormente, la madre realizó la denuncia en su contra. El presidente de la APFS denunció que el menor "fue severamente influenciado por su madre para declarar en contra de su padre bajo amenazas y agresiones físicas". Skibinsky aseguró que el niño sufre "ansiedad y sentimiento de culpabilidad" por haber declarado contra su padre.