El Palma puso fin anoche a su mejor año con una derrota en Santiago (5-3). Los de Juanito no pudieron superar la telaraña defensiva del Santiago, que desbarató todas las ocasiones de ataque de los mallorquines, que gozaron de oportunidades para engancharse al partido pero que siempre fueron por detrás en el marcador.

Derrota en un partido en el que merecieron mayor premio y en el que los palos, cuatro en total, y el portero de los locales, evitaron la remontada de los mallorquines, que acabaron el encuentros jugando con dos jugadores de pista y el guardameta debido a las numerosas tarjetas que mostraron los colegiados.

La primera ocasión fue para Taffy, que no acertó a marcar en la primera jugada del partido. Fue una declaración de intenciones porque el Santiago Futsal dio primero. Diego Quintela abrió el marcador desde el punto de penalti tras unas manos de Vadillo dentro del área a los dos minutos.

Al Palma le costó crear ocasiones en los primeros instantes del partido y apenas tenía opciones para igualar un encuentro que se puso cuesta arriba con el segundo tanto local. A partir de este momento el cuadro de Juanito lo intentó y tuvo más ocasiones para reducir la distancia, pero no hubo manera de perfoar la meta del Santiago.

Los palmesanos salieron más enchufados en la segunda parte para tratar de dar la vuelta en el marcador y Sergio redujo la distancia en la primera acción en una jugada de estrategia, pero no sirvió de nada porque los gallegos marcaron dos minutos después y encarrilaron el partido, ya que comenzaron a pasar factura las excesivas tarjetas que mostraron los colegiados.

La expulsión deTaffy, dejando al Palma con unjugador menos, lae aprovecharon los locales para marcar el cuarto gol, obra de Hugo Sánchez. Era la sentencia, pero los de Juanito no le perdieron la cara al encuentro y siguieron peleando.

Chicho consiguió el segundo tanto que mantenía las esperanzas de sacar algo positivo, pero fue entonces cuando los palos se aliaron los gallegos: Burrito, Sergio y Lemine estrellaron tres balones en la portería de Iker. El técnico del Palma apostó por arriesgarse con un portero-jugador en los últimos minutos, pero no sirvió de nada. Entre otras cosas, porque Burrito y Chicho también fueron expulsados y dejaron al equipo con tres jugadores en la pista, uno de ellos, el portero, Carlos Barrón, que incluso detuvo un doble penalti.

Cuartos en la clasificación

El Palma acaba el año en la cuarta plaza de la clasificación, favorecido también por el empate entre Jaén y Magna Navarra (2-2).