Se acerca la vuelta al cole con los exámenes, los deberes, las horas de estudio, quizá también la selectividad y las posibles peleas y frustraciones que ello conlleva. Por eso, es muy importante inculcar buenos hábitos de estudio cuando los niños son pequeños aunque nunca es tarde. (Entra en este enlace si quieres saber cómo deshacerse de los piojos definitivamente).

Crear una rutina de estudio y de trabajo

Las rutinas son importantes para adquirir hábitos. A base de la repetición, los niños pequeños aprenden muchas cosas, por eso, debemos indicarle horas concretas de estudio y estrategias específicas que puedan ser, incluso, divertidas para fomentar su concentración y trabajo.

Habilitar un espacio para hacer los deberes

Dentro de las rutinas de estudio, también es importante que haya un espacio que solo sea para las tareas académicas y que tenga todos los materiales a su disposición para estar concentrado. El lugar debe ser cómodo y agradable y que transmita tranquilidad para no agobiarle. Los aparatos electrónicos, juguetes o libros no deben estar a su alcance ni suponer una distracción.

Planificación y organización

Hay días que nuestros hijos vienen a casa con la agenda llena de ejercicios, exámenes y tareas por hacer, por eso es muy importante que aprendan a organizarse. Enséñale a enumerar las cosas que tiene que hacer por importancia y urgencia, así sabrá que pasos seguir. También resultará muy positivo el sentimiento de haber tachado todas las cosas de la lista y se sentirá realizado.

Motivarlos

La motivación es una de las claves de su interés por el estudio, no hay nada mejor que hacerles ver su esfuerzo y lo que han conseguido para ayudarles a seguir con ello. Relacionar las asignaturas con sus intereses también resultará un refuerzo positivo. Los elogios y la atención de los adultos son grandes motivadores y un gran premio para ellos.

En cuanto a los adolescentes, hay algunas otras cosas que se pueden aplicar y tener en cuenta para ser más eficientes.

  • Crear un plan de estudio: ya hemos hablado de las listas de tareas, pero si tenemos trabajos a largo plazo también es importante organizarse en un calendario. Marca las fechas de entregas o exámenes y organiza tu tiempo y tu estudio en base a eso, así aprovecharás más el tiempo.
  • Descansar: sobre todo si pasas muchas horas delante de los libros, tienes que tomarse un descanso que relaje tu mente. Da un paseo de 20 minutos en mitad del estudio, ve a tomar el aire o a hablar con tus padres.
  • Crea tus propios apuntes: si entiendes la lección y escribes tus propios apuntes, te será mucho más fácil estudiar porque sabrás que lo has entendido. Por lo contrario, podrás saber en que fallas y compararlo con la teoría del profesor.
  • Dormir suficiente: descansar por la noche es una necesidad fisiológica básica y para fomentar el aprendizaje debes dormir mínimo entre 7 u 8 horas. Si crees que no puedes "dormir tanto" porque no te da tiempo a estudiar para el examen, organízate con más tiempo la próxima vez y así podrás ser más productivo.