Una docena de bares y restaurantes se sumaron a la iniciativa gastronómica, bajo el lema No m’inflis el llonguet. Hubo música en vivo, DJ, batucadas e incluso fiestas con dimonis que dejaron un ambientazo en la víspera de la víspera de Sant Sebastià

Una comitiva formada por los dos caparrots de Orgull Llonguet y varios jóvenes con pañuelos amarillos visitaron los bares.