Balears pierde competitividad turística a más velocidad que sus rivales directos en España. Suspende en todas las variables analizadas, salvo en conexión aérea y posicionamiento en el mercado, subraya el lobby turístico Exceltur en su informe Monitur, presentado ayer durante unas jornadas celebradas en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
En 2010 Balears cayó 2,8 puntos porcentuales y se convirtió de este modo en la sexta comunidad autónoma por nivel de competitividad, superada por Madrid, País Vasco, Cataluña, Andalucía y Canarias. La Comunidad se ha visto penalizada por su estrategia de marketing y la dotación presupuestaria que dedica a este apartado. Patina en protección del territorio, atractivo de espacios públicos y compromiso medioambiental. Sucumbe por la escasa diversificación de los productos turísticos y la baja cualificación de la oferta de alojamiento y restauración. Y por último, se ve lastrada por la estacionalidad del empleo, la formación de sus trabajadores, la calidad de esta formación y por la escasa eficacia de las administraciones en la gestión de las competencias turísticas.
En sus conclusiones de ámbito general, Exceltur insiste en que "no es posible crecer por más volumen indiscriminado de turistas a precios bajos". Para ello, propone como reto principal "la identificación, innovación, desarrollo, integración y gestión diferencial de la mayor gama de productos y experiencias turísticas".
En estas mismas jornadas organizadas por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, el conseller de Turismo, Carlos Delgado, se comprometió ante sus homólogos de otras comunidades autónomas a liderar un cambio normativo que permita el acortamiento de los plazos, la eliminación de las trabas administrativas y una mejora de la seguridad jurídica. El conseller también incidió en la necesidad de mejorar tanto la conectividad aérea como la formación del sector.
