Ocho años de cárcel por intentar matar a su exjefe en un atraco en Son Serra de Marina

El acusado por intentar matar a su exjefe en un atraco en Son Serra de Marina

El acusado por intentar matar a su exjefe en un atraco en Son Serra de Marina / Enrique Calvo

Marcos Ollés

Marcos Ollés

Un hombre ha sido condenado hoy a ocho años de prisión por intentar matar a su exjefe durante en un atraco en Son Serra de Marina. El acusado golpeó a la víctima con una piedra en la cabeza y lo robó 1.300 euros que llevaba en la cartera. El sospechoso se ha declarado autor de delitos de intento de homicidio y robo con violencia durante el juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Palma, tras el acuerdo alcanzado con el fiscal y la acusación particular. El condenado deberá indemnizar al perjudicado con 21.000 euros. "Quisiera pedir perdón, estoy arrepentido y muy avergonzado", ha dicho al concluir el juicio.

Los hechos ocurrieron a las diez y media de la noche del 22 de marzo de 2022. El acusado acudió a un restaurante de Son Serra de Marina donde había estado trabajando como camarero para asaltar al dueño del negocio, con quien además mantenía una relación de amistad. El asaltante hizo un agujero en una valla perimetral para acceder al recinto y comprobó que la víctima estaba sola.

Acto seguido, el delincuente cogió una piedra de grandes dimensiones, esperó agazapado a que saliera y cuando lo hizo le atacó. Le propinó varios golpes con la piedra y patadas en la cabeza. El hombre quedó tumbado en el suelo y el procesado le arrebató entonces la cartera, en la que había 1.300 euros, y su teléfono móvil. La víctima sufrió lesiones muy graves y fue hospitalizada. Tardó más de medio año en recuperarse y le han quedado diversas secuelas.

El acusado fue detenido dos días después y desde entonces permanece en prisión. La Fiscalía le imputó delitos de intento de asesinato y robo con violencia, por los que reclamó en total 19 años de cárcel. Hoy, antes de la celebración del juicio, las partes han alcanzado un acuerdo de conformidad y la pena ha quedado rebajada a ocho años de reclusión por intento de homicidio y robo con violencia.

En el juicio, celebrado esta mañana en la sección primera de la Audiencia Provincial de Palma, el procesado ha confesado los hechos y se ha conformado con la pena pactada con las acusaciones.