CRISIS MIGRATORIA | COLAPSO EN LOS TRÁMITES PARA VERIFICAR LA EDAD

La demora de las pruebas óseas deja a 1.500 jóvenes en el limbo

Clavijo alerta de que los forenses están asfixiados con el repunte migratorio

Los menores sin acreditar no pueden recibir educación

Migrantes esperan para desembarcar del cayuco en el puerto herreño de La Restinga.

Migrantes esperan para desembarcar del cayuco en el puerto herreño de La Restinga. / EP

Néstor Santana

Cuando un migrante desembarca en Canarias y alega ser menor, pero no cuenta con un documento o una apariencia que lo acredite, la Administración debe comprobar la veracidad de sus palabras. ¿Cómo? Con una prueba ósea que determina los años de vida a través del estado de los huesos. Los médicos forenses son los encargados de realizarlas, pero el repunte de cayucos que vive que el Archipiélago desde principios de agosto los tiene desbordados. Ayer el presidente isleño, Fernando Clavijo, alertó desde el puerto de La Restinga de que 1.500 jóvenes arribados a las costas de forma irregular están a la espera de que se corrobore que realmente tienen menos de 18 años. Un limbo que obliga a la Comunidad Autónoma, que se encarga de la tutela, a mantenerlos en los centros de acogida, pero impide que puedan ser escolarizados o que formen parte de programas de integración.

La demora para efectuar esta prueba médica es de cuatro a cinco meses porque los servicios "no dan abasto y esos papeles los tiene que firmar un funcionario", recalcó Clavijo. Y es que los médicos deben ejecutar la acreditación de edad, pero luego la Fiscalía debe dar el veredicto final. Si se confirma que el joven tiene menos de 18 años, es puesto a disposición de los servicios de protección de menores. Pero si se demuestra su adultez, el tratamiento pasa a ser el de extranjero irregular, que implica mayor probabilidad de ser repatriado.

El goteo de embarcación continuó ayer. Salvamento Marítimo interceptó siete embarcaciones en las proximidades de Lanzarote Fuerteventura y El Hierro. A las 2.20 horas fue avistada la primera del día con 42 varones que partieron de Dajla rumbo a Lanzarote. Al mismo tiempo, la Salvamar Adhara salía en la búsqueda de 56 migrantes para llevarlos a El Hierro. Ya a primera hora de la mañana, un buque mercante localizó una patera con 69 personas cerca de Fuerteventura. La Restinga recibió dos cayucos más con 316 ocupantes, entre ellos una embarazada. Otro fue detectado a 28 kilómetros de la isla de Lobos y portaba a 52 a bordo, que la Guarda Talía condujo hasta Arrecife. El último fue interceptado al sur de Tenerife con 71 integrantes.

Solo con las 25 barcazas avistadas el fin de semana –entre el viernes y el domingo– en aguas cercanas a Canarias, los servicios sociales han tenido que hacerse cargo de 128 nuevos menores, que se suman a los más de 3.000 que ya acogía la Comunidad. Clavijo recordó que el Gobierno central tiene capacidad para fijar la distribución de los llegados con menos de 18 años a las Islas entre las autonomías y lamentó que el último acuerdo, que fijo 700 traslados a la Península, haya quedado en papel mojado.

Aseguró que ha tratado de ponerse en contacto sin éxito con el Ministerio de Derechos Sociales que dirige Ione Belarra para abordar la cuestión. En esa misma línea, ayer los obispos de Canarias apelaron vía comunicado a la solidaridad del resto de regiones, "pues el Archipiélago no puede afrontar solo esta contingencia".

El Hierro "no puede más"

El Hierro "está que no puede más" porque sus recursos están "totalmente colapsados", advirtió el presidente. Desde el martes han arribado a este enclave 2.355 personas en situación irregular –385 ayer–. Aunque se deriven menores y adultos a otras islas, explicó Clavijo, estas también empiezan a padecer los efectos del aumento de la presión migratoria. Prueba de ello fueron los 200 migrantes que tuvieron que dormir la madrugada del sábado a ras de suelo en el muelle de Los Cristianos ante la falta de plazas en los Centros de Atención Temporal para Extranjeros (CATE), donde los recién arribados están hasta un máximo de 72 horas para los primeros trámites de filiación policial.

La isla del meridiano solo puede alojar en condiciones dignas a 50 menores y en la actualidad sus instalaciones cobijan a más de 230. El presidente del Cabildo insular, Alpidio Armas, reprochó ayer a Clavijo la "inacción" de la Consejería de Bienestar Social ante el reto que implica atender a tantos niños en una ínsula en la que residen solo 11. 154 personas. Aseguró que a estos adolescentes se está dando techo, cama y comida, pero no educación ni acceso a programas de integración. "Esto excede de nuestra capacidad por muy buenas intenciones que podamos tener", expuso.

Desde que estalló la crisis política y social en Senegal, según un comunicado de Bienestar Social, han desembarcado en El Hierro 573 menores, de los que 340 han sido derivados a las islas capitalinas. El presidente canario también enfatizó ayer en que durante los próximos días está previsto que salgan otros 150 de los centros herreños.

Los adultos también se están trasladando para librar espacio. Debido a la cantidad de arribos que hubo ayer en menos de 24 horas, un barco fletado por el Estado, que posee la competencia sobre esto, envió a 280 personas a Tenerife. El sábado también se embarcó a otras 584 con destino la isla vecina.

"No sé qué más tiene que pasar para que el Gobierno central mire a Canarias, nos atienda y ponga un mando único", criticó Clavijo, pero Madrid tiene otra percepción del asunto. Si bien el Ejecutivo autonómico alega que las Islas están colapsadas ante el repunte, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, indicó ayer que España cuenta con los medios "personales y materiales necesarios" para hacer frente a la situación que atraviesa el Archipiélago. Recordó que el incremento de embarcaciones es coyuntural y que existe una "política real" de cooperación y coordinación con Senegal y Mauritania para frenar a las barcazas en los puntos de origen.

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Las 2.355 personas que han desembarcado en La Restinga de forma irregular desde el pasado martes han saturado los servicios sanitarios de la isla del meridiano. Ayer el presidente del Cabildo, Alpidio Armas, reprochó al Ejecutivo canario que la falta de medios para afrontar la crisis migratoria ha desabastecido los centros de salud, sobre todo en El Pinar. Y es que los sanitarios herreños están soportando "turnos interminables", reconoció ayer el Presidente isleño, Fernando Clavijo, para atender a los recién llegados. Con el objetivo de que el Servicio Canario de Salud (SCS) en El Hierro deje de estar colapsado, Clavijo se ha reunido con el Colegio de Médicos para traer a profesionales jubilados a la isla y está gestionando con Cruz Roja la instalación de un hospital de campaña en El Pinar. El director de Inclusión Social de la organización humanitaria, José Javier Sánchez, explicó el pasado viernes que el Estado ha firmado con ellos un convenido hasta 2026 para que presten la atención a pie de muelle, pero reconoce que en situaciones pico necesitan refuerzos puntuales del SCS. Esta ayuda ha supuesto entre enero y agosto para las arcas de la Comunidad un gasto de 3,5 millones de euros, de los que se destinaron a la isla del meridiano 102.00. Sanidad explica que el repunte ha elevado considerablemente esta partida en comparación con otros años.

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